La industria musical es un laberinto en el que cada día hay que formar parte de un algoritmo distinto. Llegar a la cima es casi tan complicado como mantenerse en ella, y dejarse llevar por las emociones del éxito puede suponer que, al día siguiente, la caída sea mucho más prominente.
En un gremio cada vez más competitivo y dominado por los números, DePol ha conseguido ser número uno en España (en la lista musical de éxitos de los 40 Principales) con su canción Ibiza, una gesta que coge mucho más peso si se tiene en cuenta todas las canciones internacionales que han sido un recurrente en las playlists de los oyentes.
“Escribo mis cosas y las canto”, declara el artista en su biografía de Instagram. Lo ha conseguido a la tercera, como el refranero español bien indica. Lo intentó con Quién diría y Qué bonita, pero ha sido con Ibiza cuando DePol ha conseguido ser la canción más escuchada del país. El joven artista empezó a componer en su casa con una guitarra vieja y ha escrito sobre sus vivencias, sobre todo en el amor, para inspirarse.
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“Mis canciones hablan de experiencias que he tenido, de vivencias. No es nada hipotético ni un sueño, es lo que me ha pasado y lo que siento”, declara el artista. En nuestro país DePol se dio a conocer tras participar en Got Talent España, el concurso de Telecinco en el que consiguió llegar a las semifinales. Fue precisamente en ese momento cuando conoció a los artistas que iban a impulsar su proyecto musical: David DeMaría y Antonio Fernández.
El artista catalán, que está estudiando Publicidad en la universidad (además de impulsar su carrera musical), tiene 21 años y acumula casi un millón de oyentes mensuales en Spotify. Dice que es como Hannah Montana, el papel con el que Miley Cyrus alcanzó la fama en Disney Channel. Lo dice por la dualidad, por esa vida paralela en la que combina los estudios con la fama, los conciertos con los exámenes en la facultad.
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En Ibiza, la canción con la que ha conseguido el número uno, DePol habla de un amor no correspondido y vuelve a beber de las experiencias propias para convertir su vida en un canal de inspiración musical. Con su capacidad de escribir sus propias letras y su modestia al combinar su sueño con los estudios, DePol se ha convertido en una de las grandes promesas de la música española y de una nueva generación de artistas que conectan con el público y que beben de las redes sociales para impulsar su carrera.