El incidente ocurrido el pasado 15 de agosto en El Rodadero, Santa Marta, involucró a una contratista del distrito que insultó a una turista en plena área turística.
El episodio tuvo lugar a las 2:30 de la tarde, durante un procedimiento ordenado por un juzgado de familia y liderado por un funcionario acreditado del Distrito, según informó Radio Magdalena, a través de su periodista Odín Vitola.
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El proceso, en teoría supervisado por las autoridades municipales, derivó en una situación polémica cuando la contratista, conocida como ‘la Mona’, ofendió a la turista con términos peyorativos, llamándola “Cachaca hedionda a meao” frente a otros visitantes. Este desplante se relaciona con conflictos personales y legales que involucraban a la turista y que motivaron la intervención del Distrito.
Luis Vanegas Cotes, alcalde menor, fue quien firmó y supervisó oficialmente el proceso, lo cual pone en evidencia la responsabilidad institucional en la coordinación del evento.
La agresión verbal de ‘la Mona’ se desencadenó por una solicitud de otra activista de Fuerza Ciudadana, movimiento local político que ha estado bajo el escrutinio por incidentes previos. Esta activista ganó notoriedad por sus vínculos con paramilitares de la Sierra Nevada en gestiones de apoyo electoral para los candidatos de “Naranjas Podridas”.
El impacto del incidente tiene consecuencias en la imagen turística de Santa Marta, una ciudad que se esfuerza por brindar una atención adecuada a los visitantes. Se subraya la importancia de llevar a cabo procedimientos legales con el debido respeto y a cargo de personas competentes, sin afectar el renombre de la ciudad como un destino turístico de calidad.
No es la primera vez que en El Rodadero se presentan este tipo de abusos contra turistas
“La falta de autoridad en Santa Marta está causando caos en El Rodadero durante la Semana Santa”, expresó Marcela Gómez, turista proveniente de Bogotá. Esta situación se intensifica debido a la proliferación de ventas informales y el desorden generado por la invasión del espacio público en una de las playas más concurridas de la ciudad, además de agresiones y abusos contra los turistas en esta zona de Santa Marta.
Según RCN Radio, tanto turistas como comerciantes han denunciado el desorden y la congestión que se vive diariamente en El Rodadero. Carlos Felipe Hurtado, miembro de la Asociación de Comerciantes y Restaurantes de El Rodadero (Asoresder), describe el entorno como un “mercado persa” y destaca el aumento de ventas informales, que evaden impuestos y ocupan de manera ilegal las vías públicas.
La crítica situación se hace evidente durante la Semana Santa, cuando la cantidad de negocios informales llega a ser el doble de los negocios formales. Por cada diez negocios registrados, existen veinte que operan sin regulaciones, lo que contribuye al caos. Camilo George, secretario de Gobierno, mencionó que se han implementado operativos para recuperar el espacio público, pero comerciantes y turistas coinciden en que estas medidas son temporales y el desorden regresa rápidamente.
La situación genera desilusión entre los visitantes, quienes aseguran que años atrás la playa estaba mejor organizada. Marcela Gómez añadió: “Todos los años venimos a Santa Marta y es muy triste ver como después que ya estaba esta playa bien bonita, más organizada, venimos ahora para Semana Santa y la sorpresa es grande, mucho desorden, no hay autoridad”
En respuesta a las denuncias, Camilo George enfatizó a través de su cuenta de X (antes Twitter) que las autoridades están trabajando continuamente para mejorar el orden en el área, aunque los resultados parecen ser efímeros.
Estamos poniendo orden en lo que antes era una especie de “para estado”. Toda la decisión y convicción para hacerlo. Necesitamos el apoyo de comerciantes formales y residentes de El Rodadero para lograrlo. La instrucción de Carlos Pinedo (alcalde de Santa Marta) es clara: en Santa Marta volvió la legalidad, el orden y las oportunidades”, sentenció el funcionario distrital.