Kamala Harris, CNN y la reinvención de la televisión en la era digital

En el marco de las elecciones en Estados Unidos, la TV volvió a estar en un lugar central en el ecosistema de medios y tecnología que conecta a los partidos políticos con la ciudadanía

Guardar
Kamala Harris y Tim Walz, durante la entrevista a la CNN (Créditos: @Politics_PR)
Kamala Harris y Tim Walz, durante la entrevista a la CNN (Créditos: @Politics_PR)

La entrevista de Kamala Harris y Tim Walz en CNN el jueves pasado generó mucha expectativa no solamente en Estados Unidos sino internacionalmente. Por eso no es sorprendente la gran cantidad de notas en medios y posteos en redes al respecto. La mayor parte de este contenido se ha focalizado en el contenido de la entrevista.

Sin embargo, muy poco se ha escrito acerca de qué nos enseña esta entrevista—más allá de lo dicho en la misma—sobre la comunicación política del siglo veintiuno. A mi juicio, son tres las enseñanzas que arroja un análisis de la entrevista como evento mediático.

Primero, en el marco de las elecciones presidenciales de 2024 en Estados Unidos, la televisión, lejos de pasar al olvido en la era digital, se ha reinventado para pasar a ocupar un lugar central en el ecosistema de medios y tecnología que conecta a los partidos políticos con la ciudadanía.

Segundo, esta centralidad emerge no de una fortaleza autónoma de la televisión, sino de la capacidad de amplificar el impacto de su contenido a través de la retransmisión en otros medios—incluyendo de competidores directos—y redes sociales.

Tercero, en un contexto signado por la abundancia de información disponible, la escasez ha devenido en un recurso clave para generar eventos comunicacionales de alto impacto.

Analicemos cada una de estas lecciones con mayor profundidad.

La televisión en el centro de la comunicación política

El proceso que llevó a Joe Biden a renunciar a la reelección comenzó con un evento televisado: su debate con Donald Trump. Su desempeño sembró dudas en el Partido Demócrata y en buena parte de su electorado a tal punto que con esos noventa minutos en el aire alcanzó para cuestionar la viabilidad de su candidatura.

El principal intento público de hacer control de daños por parte del equipo de campaña de Biden también fue un evento televisado: una entrevista en ABC News. El resultado de esta nueva exposición mediática fue un gol en contra, para usar una metáfora deportiva. Lejos de despejar las dudas sobre la candidatura de Biden, esta entrevista no hizo más que incrementarlas.

Desde que Kamala Harris anunció su intención de suceder a Biden al frente de la fórmula del Partido Demócrata hasta el jueves por la noche, no se había sometido a un diálogo abierto con medios y/o creadores de contenido. Había muchas maneras posibles en las que este diálogo podía tener lugar, incluyendo algunos mucho más acordes con la era digital como contestar preguntas de la audiencia en las redes. Sin embargo, Kamala Harris y Tim Walz eligieron no solamente priorizar la televisión, sino comunicarse con el electorado mediante una entrevista, tal vez el formato televisivo más tradicional.

La retransmisión del contenido como fuente de impacto comunicacional

Pero hay una diferencia fundamental en cómo la televisión tiene impacto en la actualidad respecto de cómo lo tenía hace medio siglo. Este impacto está basado mucho menos en el rating propio que en la facilidad con que el contenido es retransmitido en medios de comunicación y en redes sociales.

Medios periodísticos líderes en prensa, radio y televisión llevaron a cabo una extensa cobertura antes de la entrevista, durante la misma, y al cabo de su conclusión. Esto llevó a que competidores directos (en televisión abierta y por cable) e indirectos (en prensa, radio e internet) de CNN amplificaran el alcance de la entrevista. Los niveles de amplificación fueron tales que, por ejemplo, el sitio del medio inglés The Guardian hizo una cobertura minuto-a-minuto de la entrevista como si fuera un evento deportivo.

Algo similar tuvo lugar en las redes sociales, donde tanto CNN, como otros medios periodísticos y usuarios comunes realizaron posteos que incluyeron fragmentos de la entrevista y vínculos al sitio de CNN y sus cuentas en diversas redes sociales. Para facilitar esta retransmisión en redes, CNN dividió el contenido de la entrevista en tres segmentos de unos diez minutos cada uno, y además seleccionó numerosos fragmentos de corta duración.

Esta retransmisión tuvo un efecto de amplificación muy poderoso. Por ejemplo, al cabo de tan sólo 16 horas de que la entrevista fuera emitida por CNN, tan solo el segmento de la primera parte cuenta con más de un millón doscientas mil visualizaciones en el canal de la cadena de cable en YouTube. La sumatoria de todas las visualizaciones en los distintos segmentos en esta red muy posiblemente supere ampliamente al rating de la entrevista en la televisión por cable.

La escasez como ventaja competitiva en un contexto de abundancia informativa

Vivimos en una época con más información que nunca en la historia de la humanidad. Esta abundancia informativa presenta desafíos para la economía de la atención, ya que es difícil para las personas saber en qué contenido focalizar y qué dejar de lado. La comunicación política no es ajena a estos desafíos, ya que los candidatos deben ser estratégicos a los fines de captar la atención del electorado.

El expresidente, y actual candidato, Donald Trump ha dicho en numerosas oportunidades que se ha prestado a muchos diálogos abiertos con el periodismo, a diferencia de su contrincante Kamala Harris. La instancia de tal vez mayor impacto mediático de esta índole en su campaña ha sido la entrevista que le realizaron en julio 31 en el contexto de la reunión anual de la National Association of Black Journalists.

El video de esta entrevista en el canal de YouTube de ABC News cuenta con un millón trescientos mil visualizaciones en cuatro semanas. Esto es apenas cien mil visualizaciones más que las de la primera parte de la entrevista con Kamala Harris y Tim Walz en apenas 16 horas desde que fue subida al canal de YouTube de CNN. La sumatoria de las tres partes arroja más de dos millones y medio de visualizaciones.

En esta era de la abundancia de información, más es menos a los fines de tener impacto en la comunicación política. O, para usar otra metáfora deportiva, pareciera ser que un certero contraataque vale más que lanzar muchos centros al voleo.

Guardar