Arturo Pérez-Reverte no se caracteriza por ser un hombre que pasa por esta vida con temor a decir la verdad de lo que piensa. Lo políticamente correcto no va con él. No debe esperarse, pues, una respuesta timorata cuando se le consulta sobre un tema político. Mucho menos cuando ese tema tiene que ver con su área: la cultura.
Durante una video-entrevista, el escritor y miembro de la Real Academia Española, respondió a preguntas de los lectores de un diario español y sorprendió a la audiencia cuando uno de ellos les consultó respecto a qué haría si tuviera poder o si formara parte, alguna vez, de un gobierno.
—Estimado señor Pérez Reverte; si fuera ministro de Cultura, ¿qué tres medidas concretas llevaría en su programa? Un saludo.
La réplica del autor de El Capitán iAlatriste/i fue lapidaria y sorprendió a todos. Por su brutal ironía, sobre todo. Y por la crítica descarnada que realizó -consciente- sobre esa dependencia pública.
"Desalojar el ministerio y, una vez vacío, volarlo con dinamita. Con esa medida son innecesarias las otras dos", sentenció Pérez-Reverte a la consulta hecha por el lector del periódico El País.
Pero no fue la única respuesta que desnudó el costado más crudo del escritor español. "Dentro de unos años no se me recordará en absoluto, pero no pasa nada", fue otra de las máximas pronunciadas.
— Arturo, ¿piensas que el capitalismo es reformable o será sustituido por otro sistema algún día?
— Es lo más probable. Pero, por suerte, yo no voy a estar aquí para verlo. Eso sí, va a ser divertido de narices.
Por último, otra respuesta fue lapidaria. "Arturo, ¿crees en Dios?", se le consultó. "Cuando miro la cara de (Mariano) Rajoy, de (Charles) Puigdemont y de (Donald) Trump, pienso que ellos son la mejor prueba de que Dios no existe".
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