A pesar de las constantes descalificaciones de la autollamada “Cuarta Transformación” (4T), el Tribunal Superior Electoral de Brasil eligió al Instituto Nacional Electoral (INE) y a su consejero presidente, Lorenzo Córdova Vianello, como el jefe de la misión de observación para la elección presidencial de dicho país en octubre próximo, considerada como la más grande de América Latina.

Así lo confirmó la tarde de este miércoles Lorenzo Córdova a través de sus redes sociales, donde aseguró que la invitación es un reconocimiento al prestigio del organismo autónomo.

En un comunicado, se detalló que serán los próximos 2 y 3 de agosto cuando comiencen las reuniones de trabajo entre el Tribunal brasileño, la UNIORE y el INE, aunque la misión también estará integrada por la magistrada Eugenia Zamora Chavarría, presidenta del Tribunal Supremo de Elecciones de Costa Rica; Alberto Dalla Via, vicepresidente de la Cámara Nacional Electoral de Argentina; y el magistrado Román Jáquez, presidente de la Junta Central Electoral de República Dominicana.

Además, el instituto aclaró que los gastos generados por las actividades de la jefatura de la misión serán cubiertos en su totalidad por el Tribunal Superior Electoral de Brasil.

En junio de este año, el propio Córdova, así como los consejeros Adriana Favela y Ciro Murayama participaron como observadores electorales en la segunda vuelta durante los comicios de Colombia.

Durante aquella ocasión el consejero Murayama destacó la confianza que la Organización Electoral de Colombia le mostró al INE con dicha invitación, catalogada como una de las más importantes para el país sudamericano.

El pasado 18 de julio, el presidente Jair Bolsonaro (candidato del Partido Liberal) reunió en el Palacio de la Alvorada ante decenas de embajadores y diplomáticos extranjeros y, sin presentar evidencias, criticó en un discurso de casi una hora la presunta falta de transparencia de la justicia electoral y la vulnerabilidad de las urnas electrónicas.

Bolsonaro aseguró que el sistema vigente podría prestarse a un fraude para favorecer al izquierdista Luiz Inácio Lula da Silva (candidato del Partido del Trabajo), favorito en las encuestas para los comicios del 2 de octubre. Al respecto, la embajada de Estados Unidos en Brasil señaló que las elecciones serán un modelo para el mundo.

Brasil adoptó el sistema de urnas electrónicas en las elecciones municipales de 1996. Además de ofrecer una resultado de forma más ágil al voto papel, hasta el momento no se comprobaron problemas de seguridad.

Los dichos de Bolsonaro provocaron el lunes una fuerte reacción del presidente del Tribunal Superior Electoral, Edson Fachin, que dijo que es hora de “decir basta a la desinformación” y al “populismo autoritario”.

Algunos analistas evalúan que los ataques de Bolsonaro al sistema electoral podrían ser parte de una estrategia para no reconocer una eventual derrota en las urnas.

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