El Instituto Mexicano para la Competitividad A.C. (Imco) consideró que la Comisión Federal de Electricidad (CFE), respecto a su Plan de Negocios 2021-2025, no contempló acceder a energía más asequible a partir de las subastas de largo plazo. Asimismo, señaló que no hay claridad respecto a las inversiones en centrales de generación.
A través de un comunicado, la asociación civil señaló que el plan de la empresa productiva del Estado “se enfoca en expandir la capacidad de generación de la empresa a partir de centrales de ciclo combinado”; sin embargo, la planeación “no considera las inversiones en tecnologías renovables, ni se enfoca en reforzar sus monopolios legales: los servicios públicos de transmisión y distribución eléctrica”.
Es por esto que el Imco propuso una estrategia paralela con la finalidad de alinear las inversiones de la comisión que dirige Manuel Bartlett hacia las áreas donde la empresa tiene mayores oportunidades de negocio y tenga la capacidad de generar un mayor valor social.
Para realizar su análisis, la institución atrajo a la discusión los apagones ocurridos en 2020 y 2019, que reflejan la importancia de la política energética en los más de 10 millones de usuarios que se vieron afectados. En este sentido, el grupo que estudió dichos incidentes, descartan lo señalado por la CFE de que las fallas tuvieron origen por los generadores de energía renovable y aseguraron que “la falta de planeación y de inversión en transmisión eléctrica para favorecer áreas donde la empresa pierde recursos como la generación” fue el problema central.
De acuerdo con la crítica del Imco, el plan de la CFE sólo se preocupa de la generación de energía eléctrica; sin embargo, afirma, un inversión integral vincularía a otras cuatro áreas: transmisión, distribución, servicios de última milla (servicios de telecomunicaciones mediante el aprovechamiento de la infraestructura eléctrica) y otros (comercialización de combustibles).
En cuanto a la creación de ocho nuevas centrales generadoras, el Imco señaló que no se trata de una generación sustancial respecto a lo producido actualmente, sino que se trata de un traslado de generación del sector privado al público, lo cual indicaría un gasto no necesario.
“Por un lado, la adquisición de centrales ‘estratégicas’ de los PIE (Productores Independientes de Energía) implicará un desembolso innecesario de recursos que la CFE podría destinar a otras áreas de negocio pues esta acción no implica ampliar la capacidad total de generación del Sistema Eléctrico Nacional sino únicamente el traslado de la capacidad de generación de dichas centrales del sector privado a la CFE”, refiere el boletín informativo.
“Por otra parte, una inversión de esta naturaleza sería ineficiente, pues la empresa puede adquirir electricidad cada vez más barata a través de las subastas de energía de largo plazo o de licitaciones con los PIE”, abundó el Imco en virtud de rechazar la premisa bajo la que está operando la CFE respecto a los generadores de energías limpias.
Finalmente, la revisión del instituto asegura que el principal afectado será el consumidor, pues el esquema de producción de la CFE promueve un esquema que revalorizará a la alza los precios de la energía eléctrica, por lo cual, los usuarios verán afectada su economía personal al tener que cubrir costos mayores por el mismo servicio que se les otorga.
“En ese sentido, el Gobierno federal se vería presionado para mantener e incluso incrementar el subsidio a las tarifas eléctricas que otorga a los usuarios finales de los sectores doméstico y agrícola vía la CFE para mantener las tarifas sin cambios, con las implicaciones que ello tendría para las finanzas públicas del país en un contexto de crisis económica (solo para 2021 se destinaron en el PEF 70 mil millones de pesos para el subsidio a las tarifas eléctricas)”, sintetizó el Imco.
Derivado de estas observaciones, la A.C. propone reactivar las subastas de largo plazo de energía eléctrica, priorizar las inversiones áreas de negocio donde la CFE genera utilidades y/o con mayor potencial futuro fomentar la competencia en el suministro básico de energía y minimizar el riesgo de subsidios cruzados entre subsidiarias de la CFE.
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