Una diputada bolsonarista será juzgada por un ataque informático a la Justicia brasileña

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Brasilia, 21 may (EFE).- La Corte Suprema de Brasil aceptó este martes una acusación contra la diputada Carla Zambelli, una relevante figura de la ultraderecha que lidera el expresidente Jair Bolsonaro y quien será juzgada por "ordenar" y "planificar" una invasión de los sistemas informáticos de la Justicia.

Los cargos formulados por la Fiscalía fueron aceptados de forma unánime por los cinco miembros de la primera sala del tribunal, en una decisión que incluye al pirata informático Walter Delgatti, quien responderá como supuesto autor material de la invasión.

El ataque informático fue registrado durante el proceso para las elecciones presidenciales de 2022 y llegó a salpicar al entonces mandatario y candidato Jair Bolsonaro, finalmente derrotado en las urnas por el actual jefe de Estado, Luiz Inácio Lula da Silva.

El propio hacker admitió que fue contratado por Zambelli para acceder a los sistemas del Consejo Nacional de Justicia, en los que llegó a publicar una falsa orden de prisión contra Alexandre de Moraes, miembro de la Corte Suprema y presidente del Tribunal Superior Electoral (TSE).

Delgatti lo confesó el año pasado, al ser interrogado por una comisión parlamentaria que investigó la asonada del 8 de enero de 2023, cuando miles de bolsonaristas asaltaron la sede de los tres poderes del Estado en un intento de llevar a las Fuerzas Armadas a derrocar a Lula, quien había asumido el poder una semana antes.

Zambelli ya responde ante los tribunales por perseguir con una pistola a un simpatizante de Lula el día antes de las elecciones de octubre de 2022.

La diputada ha negado las acusaciones y afirma que "no existe ninguna prueba efectiva" sobre su participación en ese ataque informático.

Sin embargo, la Fiscalía sostiene que Zambelli "dirigió esa invasión", participó en su "planificación" y contrató a "una persona con aptitudes técnicas" para intentar "adulterar informaciones", con el objetivo de "obtener ventajas políticas" y "desmoralizar" a la Justicia. EFE

ed/cms/gbf

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