El delantero del Atlético de Madrid Antoine Griezmann explicó el "gran esfuerzo" que hizo para recuperarse a tiempo de su lesión para estar este miércoles contra el Inter de Milán, donde los rojiblancos sellaron su pase a cuartos de final de la Liga de Campeones. "Ese es el Atlético, podéis estar acostumbrados. No hay ni un partido tranquilo, hay que pelear hasta el final", dijo en declaraciones a Movistar Plus, recogidas por Europa Press, después de vencer en los penaltis en el Metropolitano. El francés, que fue sustituido en la prórroga, confesó los nervios de la tanda y celebró entre risas que por fin Jan Oblak triunfara en unos penaltis. "Nervioso, la última tanda fue la de la final del Mundial y perdimos. Estaba nervioso pero confiando mucho en los jugadores y luego tenemos un portero increíble que por fin gana una tanda de penaltis creo también", afirmó. "Sabía que era importante, son muchos esfuerzos para estar hoy jugando, con los fisios, mañana, tarde y noche. Era fecha clave, contra el Athletic fue imposible y hoy me dolió pero era importante, había que hacer un gran esfuerzo", añadió, sobre su recuperación. Por otro lado, Griezmann destacó el ambiente y el apoyo de la afición rojiblanca, sin penar en posibles rivales para cuartos de final. "Pensamos en disfrutar esta noche, el Profe nos ha regalado dos días. Da igual quién sea, seremos un rival complicado, vamos con mucha confianza a cuartos", dijo. "Llevan mucho tiempo a ese nivel, a veces nosotros fallamos pero es sin querer. Lo damos todo y al final lo vemos en los resultados, somos un equipo muy diferente aquí gracias a la afición. El domingo seguramente lo veremos", añadió, con la visita del FC Barcelona en Liga como próximo encuentro.