Experta de UNU: Los desastres ambientales y soluciones están interconectados

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Lourdes Uquillas

Madrid, 31 ago. Un desastre ambiental es solo la punta de un iceberg que tiene por debajo el impacto de muchos aspectos económicos, sociales o ambientales interconectados, pero también soluciones relacionadas, sostiene en entrevista con EFE la geóloga de la Universidad de Naciones Unidas (UNU), Liliana Narváez.

Narváez explica cómo una ola de calor en Canadá está relacionada con una inundación en Nigeria, coincidiendo con la publicación este miércoles del informe "Riesgos de catástrofes interconectadas" elaborado por la UNU, que pretende dar una "visión positiva" sobre las soluciones a las catástrofes, siempre que se adopten a tiempo las medidas necesarias.

La geóloga colombiana de la UNU sostiene que son soluciones basadas en la naturaleza, como aumentar el número de corredores verdes para paliar las altas temperaturas, como las que se registraron en la Columbia Británica, en Canadá, y que ayudan a enfriar la ciudad durante las olas de calor.

SOLUCIONES QUE VIENEN DE LA NATURALEZA

Según la experta, son soluciones basadas en la naturaleza, pero también es necesario que las personas trabajen con la naturaleza. Es el caso de Lagos, donde las inundaciones son cada vez más frecuentes y en donde es necesario trabajar para la restitución de la vegetación nativa que se ha destruido y que es la que podría brindar protección contra futuras inundaciones o el incremento del nivel del mar.

"El informe busca dar ese mensaje, que hay soluciones y todavía podemos hacer algo" para luchar contra la crisis climática, aunque su aplicación difiera de un lugar a otro, según Narváez.

"Un gran número de las soluciones viene de la naturaleza, incluso las innovaciones tecnológicas, muchas de ellas buscan regresar a la naturaleza o trabajar en armonía con ella, pero también hay una responsabilidad social frente a los riesgos".

Porque, como señala el informe, una gestión insuficiente del riesgo de catástrofes incrementó los efectos de la ola de frío de Texas, la explosión de Beirut o el brote de langosta en el desierto, entre otros.

Además, existe "una brecha que hay que reducir", asegura Narváez, porque "muchos países no están fuertes, ni aun institucionalmente" -para superar una crisis- en infraestructura hospitalaria, vías de comunicación o sistemas de alerta temprana.

Es el caso de Tonga, que estuvo incomunicada durante tres semanas por una erupción volcánica porque el único cable submarino que comunica a esta isla con Fiyi se destruyó durante la explosión y el posterior tsunami. Esa precariedad, que no tuviera otros medios de comunicarse con el exterior, fue un gran problema para el reino polinésico.

"Todos los países pueden tener una vulnerabilidad en su institucionalidad", subraya.

Por ello, existe la necesidad de trabajar juntos, de fortalecer la gobernanza, la cooperación internacional, que es "un punto muy delicado" y uno de los escollos en las negociaciones de las reuniones del clima de la Convención de Cambio Climático (COP) .

AGRICULTURA INTELIGENTE CLIMÁTICA

La cooperación internacional "tiene que ir más allá de las fronteras, porque no es responsabilidad de un solo país enfrentar la crisis climática que estamos afrontando, porque (...) todos somos ciudadanos del planeta", sostiene Narváez.

En la próxima COP27 hay que comunicar que existen soluciones y es necesario que se apliquen, como las innovaciones en agricultura inteligente climática para afrontar la sequía con la utilización de semillas más resistentes, explica Liliana Narváez.

Semillas originales, adaptadas a cada clima y región, que vuelven a los cultivos tradicionales y que se dejaron de utilizar para favorecer los monocultivos,como la moringa en Sudáfrica o cierto tipo de fríjoles.

Uno de los casos estudiados es el de Madagascar, afectada por una sequía y donde el uso de estas semillas puede incrementar la seguridad alimentaria, pero también producir cultivos más nutritivos y resistentes.

Sobre la relación entre la deforestación en la Amazonía y la sequía que se registra en Europa, China, Centroamérica o en zonas de Sudamérica como Chile o el río Paraná (Argentina), señala que es contradictorio que viendo lo que sucede en casi todo el mundo "se quiera talar el único lugar que conserva una humedad relativa y de tanto valor para el planeta".

Esto apunta el informe, encontrar un balance entre los sistemas de producción y los de protección, incide Narváez, pues es necesario encontrar un "punto ideal" para sistemas "amigables con la naturaleza".

Este estudio pretende demostrar que "las soluciones pueden tener un efecto cascada, que se repliquen y que tengan otro plus: que la solución sea más atractiva". EFE

lul/icn