La licitación del Tesoro alteró todas las reglas de juego en el mercado de bonos. Si bien el resultado se conocerá hoy, el hecho de que se licitaran Letras de Capitalización (LECAP) con rendimientos de hasta 4,2%, muy por encima de los que logran en el mercado donde rinden 3,2%, cambió la ecuación de los inversores que comenzaron a vender los bonos CER para tener pesos para la licitación.
En estas circunstancias, los bonos que ajustan por inflación y vencen el año próximo tuvieron una caída de 2,65%. Los bonos Duales que ajustan por devaluación o inflación perdieron 0,35% promedio.
La tasa más elevada de las LECAP no fue una extravagancia del ministro de Economía. La idea es que los pases del Banco Central (alrededor de $35 billones) se transformen en bonos del Tesoro. Es un paso adelante para abrir el cepo y da la posibilidad de licuar la deuda.
La medida del ministro Luis Caputo, un hombre que se formó como trader en las mesas de dinero, fue elogiada por el mercado porque avanzó en el desarme de la bomba de tiempo de los pases. Hay quienes esperan que la tasa de política monetaria, hoy en 3,3% mensual, coincida en algún momento con la de devaluación que está en 2%.
Pero hay un detalle que no entendió bien todo el mercado. El analista financiero y experto en agronegocios, Salvador Vitelli lo explicó así: “El Banco Central oficializó que se reserva la posibilidad de operar a discreción en el mercado de títulos. Hasta ahora, el Central se reservaba esa intervención si los títulos caían por debajo de los 200 puntos básicos (2%) del precio que los había licitado. Esto lo hacía para generar más atractivos, junto a los put (posibilidad de venderle al Central los bonos antes de su vencimiento), para que los bancos participen porque esta medida es como un put implícito porque asegura que, en el peor de los casos, podés perder como máximo 2%. En el volumen que manejan los bancos, ante la posibilidad de una corrida de títulos de deuda, tener un comprador que te ponga una red de 2% es un atractivo”.
“Lo que hace ahora el Banco Central es cortar con esta libertad de intervenir cuando quiera en el mercado de deuda eliminando el límite de los 200 puntos. Está quitando procesos que teníamos como nocivos como eran los put, que también los modificaron. El mercado ahora va a ser más genuino y por eso el Tesoro licita con esta tasa bastante más alta que la del mercado. Imagino una licitación bastante demandada con bastante prorrateo. Todo apunta que van a buscar la absorción de pesos para migrar deuda del Central al Tesoro. Además, como son Letras Capitalizables (LECAP) no figuran dentro del resultado financiero”, agregó.
La noticia de la suba de tasas de las LECAP, opacó hasta la segunda baja consecutiva de la soja a USD 445 por tonelada, por la guerra de aranceles entre Estados Unidos y China donde los chinos castigaron con un gravamen de 25% a la oleaginosa. La consecuencia fue una reducción de la molienda norteamericana y una caída del precio en Chicago. También bajaron el trigo y el maíz.
A todo esto, el dólar continuó con su recorrido alcista como consecuencia de la baja de tasas. El MEP aumentó $7,18 (+0,9%) a $1.052,51 y el contado con liquidación subió $9,92 (+0,8%) a $1.093,10. El dólar libre siguió su recuperación y anotó un aumento de $30 a $1.100 y dejó de ser el dólar más barato del sistema, en el día en que el presidente Javier Milei descalificó, en un discurso ante empresarios, a los que señalan que hay atraso cambiario.
El monto de negocios fue menor al habitual porque reflejó la caída de negocios en el Mercado Libre de Cambios (MLC) donde se operaron tan solo USD 297 millones. Los importadores adquirieron USD 192 millones y el Banco Central, 105 millones.
Nicolás Cappella, trader de Invertir en Bolsa, resumió la confusión del mercado. “Por empezar, en la licitación del Tesoro, se ofrecen LECAP a junio y julio con una tasa superior a lo que cotizaban en el secundario. Por lo tanto, era lógico que las LECAP más cortas abrieran en rojo. La LECAP de marzo, la más larga, si bien cotiza con una tasa menor, al tener más duration, puede capturar mayores bajas de tasas futuras, por lo tanto, permite asegurarse 3,3% de tasa efectiva mensual durante más tiempo”.
Por eso los inversores tienen puesta la cabeza en saber en qué tasa cerrarán las LECAP en la licitación adonde estarán presentes absolutamente todos los fondos de inversión, los agentes de Bolsa y particularmente los bancos que buscarán reemplazar los pases que les coloca el Banco Central al 2,8% por este instrumento que promete rendir 4% y pueden calzarlos contra los plazos fijos. Si cierran con tasa alta, deberán a ir a un prorrateo entre los participantes porque el monto licitado no alcanzará para satisfacer a todos.
Según Cappella “si el Tesoro capta más de $3,2 billones, que son los vencimientos próximos, con la diferencia le puede comprar dólares al Central y garantiza el pago de los vencimientos de los bonos de la deuda que vencen en enero”.
La medida desatará una reacción en cadena positiva para los demás bonos soberanos que pueden aumentar de precio, bajar su tasa de retorno y disminuir el riesgo país.
Pero el tema importante es el día después porque en el mercado secundario esas LECAP serán buscadas y los nuevos tenedores pagarán precios más elevados que reducirán el rendimiento conseguido en la licitación.
Caputo organizó una puja en la que el ganador es el Central porque los que ganan, pierden: bajarán las tasas originales de colocación. El sueño es que un día confluyan tasa de interés con tasa de devaluación y que la inflación baje a fin de año a 3%.
Los bonos soberanos se favorecieron por este escenario y por la sensación de que el Senado devolverá a diputados con modificaciones la Ley de Bases. El Bonar AL30D subió 1,2% y el Global 2030, 0,8%. Lo destacado fue la suba del GD35D, que aumentó 1,8%. Adcap Grupo Financiero fue uno de los que advirtió que los inversores iban a hacer este arbitraje buscando colocarse en el Global y Bonar 2035. De esta manera, el riesgo país bajó 10 unidades (-0,8%) a 1.234 puntos básicos.
La consultora F2 de Andrés Reschini resaltó que el buen clima estuvo acompañado porque “la inflación de Estados Unidos de abril fue de 0,3% y refuerza las probabilidades de un recorte de tasas en setiembre afirmando a las acciones y debilitando al dólar. Lo malo de la rueda fue que los commodities agrícolas no lograron ser parte de la fiesta”.
Sobre la suba del dólar advirtió que “los financieros siguieron firmes, pero sin desbocarse. En cambio, el blue acumula una suba del 5,8% en lo que va de la semana y puede comenzar a captar la atención, ya que es el más libre”.
Sobre el mercado de futuros indicó que “ajustaron con mayoría de subas, pero más bien marginales, siendo la máxima febrero 2025 con 0,49%. El saldo que arrojó el movimiento del interés abierto (contratos sin cerrar) fue una caída de 31,6 millones. Toda la salida se concentró en junio y julio como una señal de confianza en la prolongación del crawl al 2% mensual”.
Las acciones tuvieron su gran rueda con negocios por $32.066 millones. El Merval de las acciones líderes aumentó 4,9% en pesos y 4% en dólares. Lo más destacado pasó por los bancos, aunque la mayor suba fue de Central Puerto con 10%.
Los ADRs -certificado de tenencia de acciones argentinas que cotizan en las Bolsas de Nueva York- tuvieron una jornada en alza. Acá también lo más destacado fue Central Puerto (+8,6%) seguida de Banco Macro (+5,5%).
Para hoy los inversores esperan el resultado de la licitación. El prorrateo de las LECAP y la tasa de cierre serán clave.