¿Si no estudiamos estamos condenados a vivir en la pobreza?

Diferentes análisis señalan la importancia y las consecuencias de la interacción entre la educación y los niveles de calidad de vida.

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El analfabetismo no solo impide el desarrollo completo de las personas y su participación activa en la sociedad, sino que también tiene impactos que permanecen a lo largo de la vida (Getty)
El analfabetismo no solo impide el desarrollo completo de las personas y su participación activa en la sociedad, sino que también tiene impactos que permanecen a lo largo de la vida (Getty)

El analfabetismo, según un informe presentado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), no solo impide el desarrollo completo de las personas y su participación activa en la sociedad, sino que también tiene impactos que permanecen a lo largo de la vida. Este fenómeno afecta el núcleo familiar, limita las oportunidades para acceder a los beneficios del progreso y entorpece el pleno disfrute de otros derechos humanos.

Con este panorama, la organización Manos Unidas publicó un análisis donde se destaca la estrecha relación entre el analfabetismo y la pobreza, sugiriendo que esta interacción puede terminar siendo un círculo vicioso que afecta a millones de personas alrededor del mundo. Según los datos presentados, más de 750 millones de personas, incluidas cerca de 500 millones de niñas y mujeres, enfrentan el riesgo de caer en la pobreza debido a la falta de competencias en lectura y escritura básicas.

Posibles causas

El fenómeno del analfabetismo representa una barrera significativa que va más allá de limitar el acceso a la educación, impactando negativamente en las posibilidades económicas de las personas y su capacidad para integrarse de manera efectiva en la sociedad. Esta problemática, lejos de ser un asunto aislado, es el resultado de una compleja interacción de factores que siguen haciendo su presencia en las comunidades afectadas.

El analfabetismo representa una barrera significativa que va más allá de limitar el acceso a la educación, impactando negativamente en las posibilidades económicas de las personas (EFE/María Traspaderne)
El analfabetismo representa una barrera significativa que va más allá de limitar el acceso a la educación, impactando negativamente en las posibilidades económicas de las personas (EFE/María Traspaderne)

Entre estos factores, la baja escolaridad de los padres emerge como un elemento crítico, dado que las familias con menor nivel educativo suelen tener menos recursos y conocimientos para apoyar el desarrollo educativo de sus hijos. Este fenómeno se traduce en un apoyo limitado tanto en lo emocional como en lo académico, lo cual puede afectar la motivación y el rendimiento escolar de los niños y jóvenes.

Las condiciones socioeconómicas desfavorables son también un factor determinante, ya que la pobreza se asocia con una serie de desafíos que van desde la insuficiente alimentación, que afecta el rendimiento cognitivo, hasta la falta de acceso a materiales educativos básicos. Muchas veces, los niños en situaciones de pobreza deben abandonar la escuela para trabajar y contribuir al sustento familiar, lo que limita aún más sus posibilidades de formación y crecimiento personal.

Consecuencias

Las personas que carecen de habilidades básicas en lectura y escritura se encuentran con un abanico de oportunidades laborales considerablemente reducido. Esta limitación impacta de manera significativa su potencial para acceder a empleos mejor remunerados, lo cual, a su vez, afecta su capacidad para elevar su nivel de vida. La consecuencia directa de no poseer estas competencias fundamentales se traduce en una disminución marcada de los ingresos, lo cual no solo compromete su bienestar económico, sino que también tiene efectos negativos en distintos aspectos de su vida cotidiana.

Las personas analfabetas se encuentran con un abanico de oportunidades laborales considerablemente reducido (Getty Images)
Las personas analfabetas se encuentran con un abanico de oportunidades laborales considerablemente reducido (Getty Images)

Adicionalmente, las repercusiones se hacen evidentes no solo en la calidad y tipo de empleo al que pueden acceder sino también en la seguridad laboral. La falta de habilidades de lectura y escritura limita las opciones de empleo a trabajos de menor calidad, a menudo con escasas medidas de seguridad y protección laboral, aumentando el riesgo de accidentes o de condiciones de trabajo precarias.

Finalmente, para enfrentar este desafío global, es crucial desarrollar e implementar estrategias que aborden tanto la educación como las condiciones socioeconómicas que perpetúan el analfabetismo y la pobreza. La inversión en programas de educación básica accesibles para todas las personas, independientemente de su situación económica, es uno de los pasos fundamentales para romper este ciclo. Igualmente importante es el apoyo a las familias de bajos ingresos y la reducción de las tasas de deserción escolar, asegurando que los jóvenes tengan oportunidades para completar su educación.

Los análisis enfatizan la necesidad urgente de acción en este ámbito, invitando a gobiernos, organizaciones y sociedad civil a colaborar para crear un futuro donde el analfabetismo y la pobreza no limiten el potencial de millones de personas. De esta manera, se abrirán caminos hacia una integración social plena y oportunidades económicas mejoradas para todos, marcando el inicio de un cambio significativo en la dinámica global del desarrollo humano.