Mercedes de Freitas, directora de Transparencia Venezuela: "Estamos en una dictadura"

"En Venezuela estamos en una dictadura". Ese fue el contundente mensaje de Mercedes de Freitas, directora ejecutiva de Transparencia Venezuela, en diálogo con Infobae. Represión, violencia y atropellos contras las instituciones son las recetas que lleva adelante el régimen militar de Nicolás Maduro para hacer frente a la peor crisis en la historia del país.

La activista explicó que el desabastecimiento de alimentos y medicinas, la inseguridad, y la crisis económica que sufre el país, "crearon una situación de crisis humanitaria terrible en Venezuela, que no se supera, y no hay ninguna decisión desde el Estado para superarla".

"Venezuela está en una situación de emergencia. Necesita una solución aceptada por todos, que no está clara", señaló.

La directora de Transparencia Venezuela indicó que el régimen no sólo no soluciona los problemas del país, sino que los exacerba a raíz de la brutal represión que la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y la Policía Nacional Bolivariana (PNB) aplican desde hace un mes y medio cuando comenzó la oleada de protestas.

La violencia chavista ya se cobró la vida de más de 70 personas, además de los miles de heridos y detenidos arbitrariamente. Esto generó una mayor indignación en los venezolanos, según De Freitas, quien consideró que por ese motivo todavía la población civil resiste en las calles en busca de un cambio.

El otro factor que profundizó el repudio contra el régimen bolivariano es la polémica Asamblea Nacional Constituyente que convocó Maduro. Una medida que, tal como la plantea el Gobierno, está por fuera de lo establecido por la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.

"Lo que hizo fue generar mucha más indignación porque claramente fue cooptar hasta el poder popular que somos los ciudadanos con el voto", apuntó la activista.

La última semana Maduro presentó ante el Consejo Nacional Electoral las bases para llevar a cabo la Constituyente. Algunos actores del ámbito jurídico, del propio riñón chavista, se manifestaron en contra de esa iniciativa. La fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega Díaz, fue quien plantó bandera desde que el jefe de Estado intentó disolver el Parlamento. Desde entonces, le dio la espalda a los diferentes atropellos y violaciones contra los derechos humanos. Y la Constituyente no fue la excepción. A ella esta semana se le sumaron Marisela Godoy y Danilo Mojico, integrantes del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ).

"Todo esto demuestra que la fuerza que necesita la Asamblea Nacional Constituyente no la tienen", sostuvo De Freitas, aunque reconoció que es importante que más actores del chavismo comiencen a tomar esa misma postura para dejar sin margen de maniobra al Presidente.

"Lo que ha provocado es que la fiscal general vuelva al sitio que le corresponde, que es la defensa de la constitucionalidad y cumplir con su tarea de autonomía e independencia en la fijación de la Justicia. Cuando una de las aristas del poder se desvanece, se sale, las otras empiezan a moverse también. Hay muchos actores en ese tablero que también contribuyen, no solo la gente en la calle, no solamente la Asamblea haciendo propuestas. Para el resto del poder judicial ahora la tarea no es solamente apoyar al régimen de Nicolás Maduro sino oponerse a la fiscal", adhirió.

"Quizás el Presidente va a seguir por allí [con la Asamblea Constituyente], pero está vaciada de contenido y cualquier cosa que en este momento el Presidente, o el Tribunal Supremo apruebe, va a ser desconocida por la gente", avisó.

Desde el inicio de las represiones, el Ministerio Público, dirigido por Ortega Díaz, se ha negado a aceptar los casos de los detenidos en las marchas, porque considerar "irregulares" los procedimientos de detención por parte de las fuerzas chavistas. Por ese motivo, Maduro ordenó que esas personas sean destinadas a los tribunales militares, algo que también incumple con lo establecido por la Ley.

En ese sentido, la directora de Transparencia Venezuela celebró la actitud de la fiscal general y opinó que en este momento Ortega Díaz "está haciendo un muro de contención de los tribunales penales".

Con gran parte del poder judicial a su servicio y la, hasta ahora, lealtad de las Fuerzas Armadas, el régimen de Maduro se sostiene de esos pilares. Pero poco a poco, algunos leales ya comenzaron a darle la espalda.

"Se habla de que hay descontento en las Fuerzas Armadas. Sin embargo, todo el grupo de militares que está en control de las armas, entendemos que están muy alineados con el Gobierno (…) Otros dicen que tienen miedo, que se sienten perseguidos", manifestó De Freitas.

Remarcó, además, que "ya ha habido casos de militares detenidos" por negarse a cumplir las órdenes del régimen.

El presidente Maduro sabe que está entre la espada y la pared. Algunos ya dan por muerto al régimen. Sostienen que su ida del poder es cuestión de tiempo. Para De Freitas, "cualquier cosa puede pasar".

"Estamos dibujando todos los escenarios. El peor es donde aumente la violencia terriblemente y haya baños de sangre aún mayores, y que después de semanas de anarquía se empiecen a poner las cosas en su lugar (…) Pero hay otra salida que sería la mejor y es que consigamos actores importantes con los cuales el gobierno se atreva a sentarse", sostuvo.

Pero en cualquier caso, advirtió: "La reconstrucción va a ser muy costosa. No solamente de los bienes, sino de las relaciones, de las organizaciones, desde las personas…".

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