Drogas de diseño: "El juego con la muerte le da un sentido a la vida de los jóvenes"

La adicción a las sustancias ilegales está atravesada por diferentes variables, desde biológicas, psicológicas, familiares, sociales y hasta culturales. El psiquiatra y especialista Eduardo Kalina explicó a Infobae de qué se trata la propaganda detrás de las drogas de diseño y qué buscan los jóvenes con su consumo.

Kalina sostuvo que el mundo de las drogas de diseño se diferencia de otras sustancias ilegales, ya que existen más eslabones para producirlas y actualizarlas de manera constante: "La gente está acostumbrada a hablar del narcotráfico, que es solo una parte de un gran negocio que es el narcocomercio, que cuenta con especialistas en todo: marketing, ventas y hasta narcocientíficos".

Además, Kalina explicó que existe toda una industria subterránea de marketing en pos de tentar a la juventud.

"En Estados Unidos, el primer eslogan que tuvo fue 'Nunca te cases antes de una semana después de haber usado éxtasis'", debido a que "los estados de excitación" hacían que la gente tome decisiones erróneas, como "casarse al mediodía del día siguiente".

De hecho, resaltó que hasta el nombre, éxtasis, buscaba ser "sugestivo, vendedor, como si fuese un perfume".

"La propaganda siempre está ligada a que producen algo superior, diferente, algo que los jóvenes quieren conocer y por eso le ponen nombres atractivos: Superman, Batman o Popeye".

Kalina, quien escribió más de 10 libros sobre las drogas y sus efectos, repasó cómo se relacionan los consumidores con estas sustancias.

"El adicto tiene un vínculo muy especial con la muerte, que no se entiende en términos lógicos. Ellos intentan sobrepasarla, así encuentran un sentido a la vida, la desafían, y llegan a la sobredosis".

"El juego de ellos es ir más allá de los límites, por eso la gente más débil cae con más facilidad. Ser alguien en forma fácil, rápida".

Con respecto al desconocimiento sobre lo que están ingiriendo, el experto comentó que "pasan a ser cobayos salvajes" porque experimentan con su propio cuerpo con drogas "sin ningún cuidado" en la búsqueda de estados superiores.

Finalmente, el especialista explicó que existe un paralelismo entre el estilo de vida de la sociedad moderna, donde todo debe ser inmediato, instantáneo, y la manera en que las drogas sintéticas actúan en el organismo.

"Las drogas de laboratorio generan un estado de euforia, exaltación, que en psiquiatría llamamos estado de elación, de manía. Son estados donde el placer y la diversión está por encima de todo. Las palabras consecuencia o futuro no existen, es el momento por el momento, lo cual las vuelve muy peligrosas".

"Todo ocurre muy rápido en un mundo como el de hoy, que todo se busca que sea rápido. Quieren hacer todo ya mismo. El encanto de la sustancia es que permite ser otros en poco tiempo y ese momento les cuesta la vida".