La ciencia reveló cuál es la mejor forma de dejar de fumar

Hay algunos que eligen un programa gradual, otros cortan el vicio de raíz. ¿Qué funciona mejor?

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Dejar el cigarrillo supone un enorme y difícil desafío para todos los consumidores. En el camino hacia el abandono existen diferentes técnicas y procedimientos. También aparece el dilema: ¿es mejor dejar de fumar de manera paulatina o de un modo abrupto? Una reciente investigación científica reveló que el corte inmediato es la solución más eficiente como para poder decirle adiós al tabaco.

El estudio fue conducido por un grupo de psicólogos de la Universidad de Oxford y demostró que aquellas personas que decidieron terminar de inmediato su relación con el cigarrillo tuvieron mucho más éxito con su abstinencia.

"Hay que ser claros. Nuestros resultados deberían ser particularmente útiles para aquellos que quieren dejar de fumar y no saben cómo hacerlo", explicó Nicola Lindson-Hawley, psicóloga de Oxford y líder del estudio.

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El manejo de la dificultad

El grupo de investigadores reclutó a 697 personas para realizar el estudio. Se eligieron a individuos con el deseo de abandonar el hábito y que, en ese momento, fumaban al menos 15 cigarrillos diarios. La premisa para todos los participantes era que en un período de dos semanas, todos debían abandonar el tabaco.

El grupo se dividió en dos: una parte tuvo la tarea de finalizar su consumo de manera inmediata, mientras que la otra lo debía hacer de un modo gradual.

Durante ese período, los que integraban el grupo de "abandono paulatino" apelaron a parches de nicotina y otras terapias de reemplazo, mientras que el grupo de "abandono abrupto" fumó con normalidad hasta el último día.

Después de seis meses, un 22% de los que dejaron de fumar de golpe no volvieron a acercarse al tabaco

El informe se reanudó un mes después para ver el estado y la capacidad de los voluntarios de mantener su abstinencia. Un 49% de aquellos que habían dejado de fumar de manera inmediata lograron mantenerse lejos del tabaco, mientras que en el otro grupo lo logró un 39,2%. Seis meses después, el 22% de los que dejaron de fumar de una vez lograron evitar la recaída y hubo un 15,5% de éxito en el otro grupo.

"Descubrimos que la mayoría de las personas preferían la idea de terminar de fumar de una manera gradual. Se trataba de gente que ya vino con el deseo de cortar el consumo de cigarrillo lo antes posible. Para esos casos, nuestra recomendación es elegir un día y cortar de manera definitiva. De todos modos, apoyamos desde el primer minuto a los que también lo quieren hacer de manera gradual. El hecho de querer dejar de fumar ya es un avance", detalló Lindson-Hawley.

La investigación, publicada en la revista Annals of Internal Medicine, recibió elogios de científicos de todo Reino Unido. Mike Knapton, director médico de la Fundación Británica del Corazón destacó: "Este estudio dejó claro que la manera más efectiva de dejar de fumar es hacerlo de manera inmediata. No me voy a cansar de repetirlo: abandonar el cigarrillo es de las mejores cosas que se pueden hacer para la salud del corazón".

Lindson-Hawley reconoció que su próxima investigación estará enfocada en l

os diferentes métodos disponibles para aquellos que no puede afrontar otro camino que el abandono gradual del tabaco.