Murió Zaha Hadid, la gran estrella de la arquitectura mundial

Falleció en Miami a los 65 años. Fue una de las mayores exponentes contemporáneas y una de las primeras mujeres en recibir prestigio internacional en su industria

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Zaha Hadid, una de las mayores estrellas de la arquitectura moderna, murió hoy a los 65 años luego de sufrir un infarto mientras estaba hospitalizada en Miami por un problema en los bronquios. Las obras más reconocidas a nivel mundial de esta arquitecta anglo-iraquí incluyen la Guangzhou Opera House en China, y el Centro Acuático de Londres.

La arquitecta fue internacionalmente reconocida tanto por su trabajo académico como por sus obras construidas. Cada uno de sus innovadores proyectos realizados a lo largo de 40 años de carrera, manifiestan su ambición y experimentación, tanto en los rubros de la arquitectura como del diseño y urbanismo. Catalogada por sus colegas como "altamente rigurosa y exacta", su labor incluye desde edificios hasta muebles, calzado y autos.

"Parte del trabajo de un arquitecto es hacer sentir bien a la gente con los espacios donde habita, donde trabaja, donde estudia. Entonces, debemos comprometernos para mejorar nuestros estándares aún más", había dicho Hadid al ganar la Royal Gold Medal de 2016, y convirtiéndose de esta manera en la primera mujer en recibir el prestigioso galardón inglés.

Nacida en Iraq hace 65 años, Zaha Hadid pasó la mayor parte de su vida en Londres, donde se graduó como arquitecta de la Arquitectural Association School of Arquitecture. En la capital inglesa fue donde fundó su propio estudio en 1979, y desde ese momento su carrera se disparó y estuvo siempre en alza.

Diseñó impresionantes obras como el Rosenthal Centre for Contemporary Art (Cincinnati, Estados Unidos), la Guangzhou Opera House (China), el MAXXI (Museo Nacional del Arte del Siglo XXI, Italia), el Centro Acuático de Londres y la lista sigue. No por nada fue merecedora ni más ni menos que del premio Pritzker en 2004, siendo la primera mujer en ganarlo.

Además de los trabajos y premios mencionados, su contribución a la arquitectura la hizo ser parte de la lista de Forbes de las mujeres más poderosas del mundo, como también de la lista de las 100 personas más influyentes del planeta, realizada por la revista TIME. También ha sido distinguida por la UNESCO con el premio "Artista por la Paz" y por la República de Francia con el título de "Comendadora de la Orden de las Artes y las Letras". En 2012 fue nombrada "Dama Comendadora de la Orden del Imperio Británico" por la Reina Elizabeth II.