Cercado por la crisis, Nicolás Maduro redujo más de un 30% las importaciones

El jefe del equipo económico del gobierno informó el viernes que Venezuela espera realizar este año importaciones no petroleras por 15.000 millones de dólares, cifra que representa una caída del 32% en comparación con los registro de 2015.

El fuerte descenso que han sufrido los precios del petróleo, que representa cerca del 94% de los ingresos que recibe el país por exportaciones, forzó al gobierno venezolano a imponer fuertes recortes en sus cuentas.

Uno de los recortes vendrá por la vía de las importaciones no petroleras, que no pasarán este año de "15.000 millones de dólares", dijo en entrevista con The Associated Press el vicepresidente de Economía, Miguel Pérez Abad.

En 2015 las importaciones no petroleras fueron de 22.162 millones de dólares mientras que en 2014 alcanzaron los 36.677 millones de dólares.

Pérez Abad indicó que a pesar de la situación adversa, entre las prioridades del gobierno está el dar atención a los rubros de alimentos y salud. Agregó que el caso del sector de farmacia se aprobó para este año un plan de divisas que "no superará los 1.200 millones de dólares", monto que está muy por debajo del presupuesto del 2015, que fue de 3.600 millones de dólares.

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Sobre el impacto que la merma en las importaciones puede generar sobre la escasez, que es uno de los principales problemas que agobian a los venezolanos, el vicepresidente de Economía afirmó que para atender esa dificultad, el gobierno aumentará los puntos de venta de los bienes considerados como esenciales y se irá a un "sistemas de abastecimiento directo a través de las gobernaciones y las alcaldías" para lograr llegar directamente al consumidor.

Para atender los millonarios compromisos pendientes con los proveedores internacionales de la industria privada de alimentos, que han originado un retraso en el ingreso al país de materias primas, lo que ha agudizado los problemas de desabastecimiento, Pérez Abad dijo que el gobierno está llegando acuerdos para realizar reestructuraciones de deuda, cancelaciones con bonos y el "pago de deudas pendientes para valores equivalentes de importación de insumos", pero no ofreció detalles sobre los montos o las empresas con las que están negociando.

El vicepresidente de Economía se mostró confiado en los ajustes que se hicieron al sistema de control de cambio, que operará con una tasa fija de 10 bolívares por dólar y otra flotante que está actualmente en 215 bolívares por dólar y se espera mover periódicamente. Anteriormente el sistema de control de cambio, que está vigente desde 2003, funcionaba con tres tasas.

Durante los tres años de gobierno del presidente Nicolás Maduro, las autoridades financieras hicieron anuncios orientados a establecer un tipo de cambio flotante pero nunca se lograron avances concretos. Pérez Abad dijo que en esta oportunidad hay una intención firme de lograr que el llamado "tipo de cambio complementario" vaya a un proceso de "flotación gradual" en el que el Estado no va a intervenir para controlar la tasa y solo se reservará el derecho de participar por la vía de la oferta.

Agregó que la idea de las autoridades es ir hacia una "tasa de equilibrio", a la que esperan llegar de forma gradual.