Kinder-chorros: banda sub-12 amenaza a los comerciantes en Córdoba

En un barrio céntrico, una pandilla de delincuentes cuya edad no supera los 11 años es responsable de asaltos que tienen a los vecinos preocupados. El fenómeno está asociado a las maras latinoamericanas

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Fernanda es la dueña de un centro terapéutico del barrio Nueva Córdoba. Estaba trabajando en la sección de fisioterapia del centro cuando escuchó los gritos de otra empleada alertando que había ingresado un chico preguntando por "su tía". La empleada se dio cuenta que algo pasaba porque en ese momento los clientes que estaban en el lugar eran sólo 2 o 3 hombres debido a que era el horario de cierre.


Inmediatamente detrás del primer chico entraron dos más. Los niños tenían 4, 7 y 11 años. El de 4 se fue detrás del mostrador buscando dinero en la caja y el de 11 se dirigió al fondo del local y comenzó revolver cajones buscando algo para llevarse.


Cuando vio a dos empleadas del centro que intentaban frenarlo, les saltó al cuello para apoderarse de las cadenitas que tenían. Al mismo tiempo, las agredía con trompadas y patadas. En el forcejeo les rompió la ropa.


"Eran muy violentos, nos daban piñas, patadas. Los nenes la tenían clarísima, lo primero que te hacen es saltarte al cuello para sacarte la cadenita, meterte la mano en los bolsillos y arrancártelos", contó Fernanda.


Con la ayuda de uno de los clientes lograron reducir al de 11 años mientras que el de 7 y el de 4 escaparon. Cuando llegó la policía, el oficial a cargo del operativo dijo "otra vez estos nenes". La banda de precoces ladrones había sido apresada una semana antes por un hecho similar y contaba con varios antecedentes por robos con la misma modalidad.


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La dueña de un centro terapéutico en Córdoba contó el intento de robo que sufrió - Gentileza: Cadena 3

Detrás de este "modus operandi" siempre hay un mayor que "entrena" y "regentea" a estos pequeños ladrones. Además, la modalidad es cada vez más utilizada porque los menores son inimputables y no pueden ser sometidos a un proceso penal, lo que dificulta descubrir la actividad del mayor de edad que propicia la actividad delictiva.