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La pulseada entre el oficialismo y la oposición cobra diariamente mayor intensidad y no hay indicios de que vaya a moderarse en lo inmediato. Sin embargo, hay algunos hombres de la política que no se resignan e invitan a buscar un camino que mejore la convivencia.
En ese grupo se encuentra Gustavo Marangoni, quien consideró que "hacer la 'resistencia con aguante' es algo infantil, porque "la Argentina no es un paraíso ni lo era, pero tampoco era o es un infierno".
En declaraciones a radio El Mundo, el referente económico del sciolismo consideró: "Hay que trabajar para ser autocríticos y solucionar problemas, acompañando las buenas decisiones y remarcando las incorrectas".
En ese sentido destacó como un acierto la salida del cepo, aunque señaló un punto crítico: "Estamos viendo un aumento de precios que no tiene una contrapartida de medidas, más allá de ciertas apelaciones a la buena voluntad que no son suficientes".
Para Marangoni, "la inflación es el tema político y económico del año", porque "de su extensión en el tiempo dependerán muchas otras cosas". En diálogo con radio Vorterix, el economista señaló que "a la devaluación o sinceramiento del tipo de cambio le debían haber correspondido otras medidas para morigerar su impacto".
"Si uno toma el lapso noviembre-febrero, la inflación está cerca del 15%, lo que claramente supone un golpe al bolsillo", estimó el hombre que hubiera sido presidente del Banco Nación, si Daniel Scioli hubiese ganado las elecciones presidenciales. "Además a ese promedio hay que sumarle cinco puntos en el rubro alimentos, lo que impacta aún más en los sectores más vulnerables de la población".