La fotografía es un arte que se mantiene y crece. En una era en la que cualquiera puede realizar interpretaciones subjetivas del momento desde un teléfono móvil, todavía están aquellos que realizan proyectos a largo plazo, que no temen pasar meses de frío o dormir a la intemperie en la selva, todo por un simple click; un click que es mucho más que eso, más que una imagen, más que una foto.
Un click que tiene un objetivo, un pensamiento, un sentir detrás, que hace que estos hombres y mujeres dejen sus vidas de ciudad, a sus familias y, hasta a su salud, para embarcarse en el sueño de que algún día, la persona que vea su captura pueda, aunque sea un poco, sentir lo que ellos en ese momento.
Rick Guidotti es un fotógrafo itinerante entre Nueva York, París y Milán, especializado en moda, con experiencia en revistas como Elle, GQ y Marie Claire, entre otras.
En De estigma a supermodelo relata cómo cansado de que le dijesen quién era linda y quién no, y tras un encuentro casual en la calle con una chica con albinismo, que lo sorprendió por su belleza, comenzó un proyecto de mostrar al mundo una perspectiva diferente, sin preconceptos, de la hermosura.
A partir de un shooting que fue publicado en Time, en 1998, Guidotti repitió la experiencia alrededor del mundo, con jóvenes que al ingresar a la sesión mostraban no tener autoestima y salían con un nuevo concepto sobre sí mismos.
Los encuentros casuales pueden cambiar la vida de las personas, como le sucedió a Alec Soth y a Stacey Baker. Así lo explican en Este es el aspecto del amor duradero.
Soth ya había publicado en varias revistas, cuando Baker lo contactó para que realizara una foto de sus padres. Luego de ese encuentro, Stacey quedó impactada por la experiencia, dejó su trabajo y comenzó a estudiar fotografía. Al poco tiempo, ya estaba trabajando para el New York Times.
Si bien no fueron ni son pareja, esa especie de unión que sintieron los llevó a realizar un proyecto en conjunto: ¿Cómo son las primeras citas? Así, la soltera Stacey se embarcó en la encuentro de "citas rápidas" más popular de Las Vegas, en el día de San Valentín.
Luego, ambos volvieron a la ciudad del pecado, pero esta vez para ingresar en el mundo de los matrimonios que vivían en casas de retiro. "¿Qué es más hermoso -reflexionó Soth- la foto de una pareja joven que se acaba de enamorar o la idea de dos personas aferrándose a esta imagen?"
Sin embargo, no todos son relatos de amor y esperanza. En Combatientes y dolientes de la revolución ucraniana, Anastasia Taylor-Lind recordó su experiencia en Ucrania, donde cubrió el Euromaidán, las manifestaciones y disturbios que comenzaron el 21 de noviembre, luego de que el gobierno de Víktor Yanukóvich suspendió la firma del Acuerdo de Asociación y el Acuerdo de Libre Comercio con la Unión Europea en beneficio de Rusia.
Su estrategia constó de montar un estudio fotográfico improvisado, junto a las barricadas de la calle Hrushevsky, donde fotografió a los luchadores con un fondo negro.
"Con el fin de contar las historias humanas individuales allí, sentí que tenía que sacar los dramáticos elementos visuales que se habían vuelto tan familiares y repetitivos en los principales medios de comunicación", explicó la anglo-sueca.
Por su parte, el foto-periodista James Nachtwey, en Fotografias, fiel testimonio de la crueldad humana reflexionó : "La fotografía documental le da voz a aquellos que de otra manera no la tendrían y, como reacción, estimula a la opinión pública y le da ímpetu al debate".
A partir de este pensamiento, desarrolla una crítica sobre el rol de la prensa, entre lo comercial y la responsabilidad periodística. Además, realiza un recorrido por sus capturas más icónicas a lo largo de los conflictos armados de los últimos 40 años.
En Los originarios prisioneros de guerra de Estados Unidos, Aaron Huey, quien convivió con los Lakotas, Sioux, en la reserva de Pine Ridge, en Dakota del Sur, se preguntó "¿Qué sucedió con uno de los pueblos originarios más conocidos de Estados Unidos?
Huey realiza un recorrido por la historia de los Lakota, "sobre los tratados hechos, los tratados rotos y las masacres disfrazadas de batallas" desde 1824 hasta la actualidad.
Iwan Baan es reconocido por fotografiar las edificaciones más modernas del planeta, de Dubai a Nueva York. Sin embargo, el fotógrafo holandés está tan interesado en esa parte comercial de su trabajo, como en lo que sucede una vez que las personas toman posesión de los lugares y cómo estos pueden mutar en algo completamente diferente a lo que, a priori, tenían como objetivo.
Así, Baan en Viviendas ingeniosas en lugares inesperados relató su experiencia cuando se internó en la nueva vida de estas obras arquitectónicas, como también durante el proceso de construcción de obras monumentales, en las que los trabajadores forman sus propias ciudades improvisadas, con sus leyes y reglas, que muchas veces no responden a los esperado.
El brasileño Sebastião Salgado es una de las pocas eminencias que aún, con ojo quirúrgico, prefiere el blanco y negro por sobre el color. A lo largo de su carrera a través del globo ha capturada instantáneas que ya se encuentran entre las grandes obras de este arte.
En su charla El drama silencioso de la fotografía recorrió sus orígenes en una granja y cómo el exilio lo empujó hacia la fotografía y, a su vez, como su oficio comenzó a matarlo aún estando sano, cuando perdió "la fe en la humanidad". Sin embargo, este desengaño lo llevó de nuevo a su tierra natal, donde a partir de un proyecto conservacionista de la naturaleza pudo volver a disfrutar del otro, de la existencia, de la vida.
Esta conexión entre el hombre y la naturaleza como motor puede verse en Cuentos de tierras maravillosas rodeadas de hielo.
El destino de Paul Nicklen estuvo unido al hielo desde que su familia se mudó a la isla Baffin, cerca de Groenlandi, cuando tenía cuatro años. A diferencia de la mayoría de los chicos del planeta, su arenero fue la nieve y sus mejores amigos los inuits (esquimales).
El también biólogo llegó a pasar sentado por dos meses en el mismo lugar, a la espera de un oso kermode ("espiritual"), una especie en extinción, blanco como el oso polar, pero que nunca había sido fotografiado hasta que descendió para posar justo a pocos metros de él. La misión de Nicklen en la vida es demostrar a través de su trabajo que "materializar", hacer visible lo que se perderá con el derretimiento de los polos, con la desaparición del hielo de la faz de la tierra.
"A través de mi trabajo trato de articular que los humanos no están separados de la naturaleza y que todo está interconectado", dijo Camille Seaman en Fotos cautivadoras del hielo polar, quien desde hace más de 10 años captura imágenes de los "icebergs ancestrales" en la Antártida.
La vida de Frans Lanting cambió cuando conoció a un sabio de una tribu, no lejos de Vancouver, quien le relató la leyenda de Kwikwasut'inuxw, una reunión milenaria donde los animales se desprendían de su apariencia para bailar en igualdad.
El holandés, además, relató su experiencia en Imágenes que dan voz al reino animal y como "trata de trascender las diferencias genéticas para apreciar lo que tenemos en común con todos los demás seres vivos".
Finalmente, en Alucinantes fotografías de Everglades, un lugar en peligro, Mac Stone explicó: "Mi trabajo es usar la fotografía como herramienta comunicacional, para ayudar a tender puentes entre la ciencia y la estética, para hacer que la gente hable, piense y que, con suerte, le importe".
"Incluso en los momentos más oscuros y de desesperación, se puede pensar 'Quizá haya una foto para sacar aquí, una historia para contar´", finalizó.