Se fugó de un penal, lo recapturaron, se olvidaron de cerrar la celda y volvió a escapar

Se llama Blas Armando Giunta, como el jugador de Boca. Huyó junto a otro preso que estaba alojado con él en la comisaría 1º de la localidad bonaerense de Azul. Desplazaron a los guardias

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Lo que empezó como un accidente de tránsito terminó con una insólita fuga de una comisaría de la localidad bonaerense de Azul. Un delincuente que había huido de un penal fue recapturado luego de protagonizar un choque con su moto, pero volvió a escapar, porque la puerta de su celda estaba abierta. Escapó junto a un compañero que había sido detenido por robo. Su nombre le dio una cuota extra de atención a la crónica policial: Blas Armando Giunta, como el jugador de Boca.

Giunta, de 21 años, purgaba una condena por robo en la Unidad Penal 7 de Azul bajo la modalidad de régimen abierto. Pero durante una salida transitoria decidió no volver, por lo que el Juzgado de Ejecución Penal de Trenque Lauquen libró una orden de captura con su nombre, que se materializó en la tarde del domingo.

Ese día, un llamado anónimo avisó a la policía que un joven se había accidentado en la esquina de Burgos y Catamarca. Cuando los oficiales del Comando de Prevención Comunitaria llegaron al lugar corroboraron que la moto en la que circulaba Giunta había sido robada. Y unas horas más tarde, ya en el hospital municipal Ángel Pintos, comprobaron la identidad del herido, que tenía un pedido de captura.

El martes, luego de permanecer en observación durante 48 horas, Giunta fue trasladado a la comisaría 1º. Lo alojaron en una celda junto a otras dos personas que también habían sido detenidas por robar una moto, Roberto Javier Olivera (38) y un joven identificado por su apodo, "Kaká". Pero los oficiales de guardia se olvidaron de cerrar con llave la puerta, lo que facilitó la huida de dos de los tres: Giunta y Olivera se fueron caminado por la entrada principal.

La división de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad bonaerense apartó a los dos policías que estaban trabajando en la comisaría en ese momento: un oficial de guardia y un imaginaria, que es el agente a cargo del cuidado de las celdas. El error lo pagaron con su trabajo.