Alarmante récord de México: un linchamiento cada cinco días

En lo que va del año se registraron 63 casos. Como el nivel de impunidad alcanza el 98%, los ciudadanos creen que la única forma es hacer justicia por mano propia. La falta de autoridad es clave

Compartir
Compartir articulo
 AFP 163
AFP 163

Al menos 63 linchamientos se registraron en lo que va del año en México, todo un récord en un país en el que la violencia suele estar más vinculada al narcotráfico que a la "justicia por mano propia".

Cada cinco días se produce uno nuevo. La fórmula"impunidad más crisis de autoridad" es el cóctel explosivo que los ciudadanos no aguantan. Los expertos consideran que los linchamientos son una de las formas de violencia social que muestran el hartazgo de la sociedad frente a la autoridad que no actúa o que lo hace incorrectamente.

"Cuando hay un linchamiento es porque ya hubo impunidad"

"Cuando hay un linchamiento es porque ya hubo impunidad, los ciudadanos que toman la justicia por su propia mano desconfían de la justicia por parte del Gobierno", expresó Francisco Rivas Rodríguez, director general del Observatorio Nacional Ciudadano (ONC) en una entrevista que le concedió a SinEmbargo.

El fenómeno no afecta a todo México de la misma forma. Los 366 casos registrados entre 1988 y 2014 se produjeron, principalmente, en el centro y el sur del país, según se desprende del estudio de Raúl Rodríguez Gillén y Norma Ilse Veloz Ávila, "Linchamientos en México: recuento de un período largo".

Linchamientos en México- recuento de un periodo largo (1988-2014).pdf
El informe "Linchamientos en México: recuento de un periodo largo (1988-2014)"

El documento muestra que los hechos principalmente ocurren en la zona rural del Distrito Federal y la zona conurbana del Estado de México, Puebla, Oaxaca, Morelos y Guerrero, aunque también se registraron casos en Baja California y Quintana Roo.

Para Rodríguez Guillén, profesor del Departamento de Sociología de la UAM Azcapotzalco, en las últimas tres décadas México ha vivido un proceso de desgaste institucional que se expresa en la violencia política y social creciente.

Los casos tienen una origen común: inseguridad y ausencia de autoridad

"Los linchamientos tienen una raíz común: la inseguridad y la ausencia de la autoridad. La imagen negativa que se tiene desde la sociedad de los integrantes de las fuerzas policíacas y militares, así como de las autoridades políticas, de los jueces y ministerios públicos, lo que propicia que las personas tomen justicia por su propia mano", explicó el académico de la UAM.

"El linchamiento –agregó Rodríguez Guillén– es un fenómeno que tiene características altamente violentas, se dan con mucha celeridad, o sea son muy rápidos, se realizan de manera espontánea y por autores anónimos".

LEA MÁS:

La periodista Gardenia Mendoza, corresponsal en México de Impremedia, un importante grupo de diarios en español de los Estados Unidos, destaca el altísimo nivel de impunidad que existe en el país. "Los linchamientos se producen principalmente porque la gente no tiene confianza en las autoridades de Justicia y la Policía: el nivel de impunidad en México es del 98% y creen que si dejan a los presuntos bandidos en manos de las autoridades no habrá justicia", aseguró días atrás a Infobae.

La escena suele repetirse: personas son acusadas de algún tipo de delito en zonas con altas tasas de delincuencia e impunidad; luego, una avalancha humana enfurecida las agarra in fraganti o, si ya fueron encarceladas, las saca a fuerza de violencia de las prisiones y comienza a propinarles una paliza que suele terminar con su vida. Muchas veces, incluso, los prenden fuegos. Los queman vivos.

 AFP 163
AFP 163

Probablemente el narcotráfico influya en la percepción de seguridad que tienen los ciudadanos, pero Mendoza advierte que la relación con estos casos no es para nada directa –si es que hay alguna. "Los linchamientos son, principalmente, por robo o secuestro", aseguró Mendoza.

Para el criminólogo y sociólogo del Instituto Nacional de Ciencias Penales (Inacipe), Daniel Cunjama López, el Estado fue incapaz de proveer la seguridad a la población de estas localidades, lo que originó un deterioro progresivo hacia el trabajo de las autoridades.

Los linchamientos están claramente en ascenso. Los años con las mayores cantidad de casos habían sido el 2010 (con 27) y 2013 (40). Pero este año las cifras ya batieron el récord.