Apoyado sobre la cornisa, está construido de manera escalonada en una serie de terrazas. En una de ellas se encuentra el magnífico jardín pavimentado con adoquines de granito y florecido todo el año. En otra de las terrazas, surge una sorpresiva piscina donde el agua parece contenerse a sí misma asomada al mar turquesa.
La restauración del monasterio demandó 10 años con el más riguroso respeto hacia el espacio y los volúmenes existentes. Cada elemento fue conservado y adecuado para su utilización, como las puertas de hierro forjado que eran del confesionario, y donde hoy tras ellas, vislumbramos una bodega que contiene las marcas más reconocidas de vinos internacionales.
Este enorme complejo de grandes dimensiones sólo ofrece 20 habitaciones y suites, con el confort y el máximo nivel de calidad y de servicios, conservando en sus ambientes el sabor de otros tiempos, permitiendo a los huéspedes sumergirse en otra realidad, sin renunciar a las ventajas de la modernidad.
Hoy el Monasterio cuenta con un completo spa y todos los elemento necesarios para un placentero relax. Un lugar ideal para obtener energía y bienestar, en un escenario único. Sauna, baño turco, duchas, piscina hidroterapeutica, en una perfecta combinación entre la armonía del descanso y el cuidado del cuerpo.
El Monasterio Santa Rosa es un excepcional hotel, como pocos en el mundo, debido a su exclusiva ubicación como a la singular atmósfera que encontramos dentro de sus muros.