Rocío Marengo: "Estoy de novia con un político de toda la vida, hacemos campaña por Daniel Scioli"

"De chiquita cantaba la marcha peronista más que el arroz con leche", bromea. Tan linda como polémica, cuenta aquí sus técnicas de seducción, una cita imaginaria con Lanata y anteriores "relaciones tormentosas"

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—Sí, tranqui [risas]. El leopardo me gusta, tiene fuerza.

—A veces. Depende el día, depende la noche.

—Depende la compañía, pero siempre depende de mí más que del otro. Tengo varios looks. Te quiero ir diciendo que soy tímida. Parezco, pero no.

—Sí.

—No. Los tipos saben con quién sí y con quién no. No solo el tema de ofrecer, sino el tema de cómo tratan a una mujer, es depende de cómo una se plante. Yo tuve novios siempre perfil bajo. Me gusta un tipo de hombre que no es el que te ofrece.

—No sé. No, creo que si está bueno el tipo, hasta me puede llegar a calentar la idea de sentirme un poco así. Pero con algún tipo en especial. Hay hombres que, por más oro en el mundo que me ofrezcan, no podría ni tomar un café. A mí hay tipos que me producen rechazo y no podría estar. Yo no las critico a las que lo hacen. Es más, admiro el estómago que pueden tener para estar con cualquier tipo que les pague. Yo no tengo ese estómago. Me parece que puta se nace y no se hace, y yo nací de otro estilo. Fui criada de una manera muy diferente, con valores, con otras cosas que están muy alejadas.

—Muchas cosas, la inteligencia me seduce mucho. Un tipo inteligente me puede. ¿Qué más? Los tipos altos, con buen porte también me gustan.

—Un poco más grandes que yo. He conocido chicos más chicos y después no se bancan estar con una mina que está expuesta, que viaja, que es independiente, que no les pide nada. Como que se empiezan a sentir menos.

—Sí. Es más grande que yo, es inteligente, me hace muy feliz, me cuida.

—Sí. Acá debe haber periodistas políticos, así que voy a andar tranquilita.

—Que me hace muy feliz, si no lo digo y si no nos mostramos públicamente, es porque él está muy expuesto, está en plena campaña. Estamos con Scioli.

—Yo ya estaba, pero dio la casualidad que él también. Estamos muy bien y no tenemos la necesidad de mostrarnos.

—Compartida. Yo siempre fui muy de cuidar, por más que parezca todo lo contrario. Pero quiero mostrarme como soy, y soy de cuidar mucho lo verdadero. Son pocas cosas que uno tiene que cuidar de verdad en este medio. Es un medio muy dañino, muy malo, y yo con mi familia nunca trancé.

—Sí, está con Scioli.

—Bueno, ese detalle no te lo puedo decir. Pero es político de toda la vida. No es alguien nuevo o un empresario que se tiró ahora a la política. Es una persona que hace mucho tiempo está.

—Sí.

—No, pero sí me gustaba. Este último tiempo, con detalles que fueron pasando, me fui inclinando más por Scioli. La verdad es que me gustaban los tres. Macri, me parece que está rebien en la Ciudad, pero lo de Niembro me tiró para atrás. Hoy por hoy, de los tres, me quedo con Scioli.

—Soy de cuna peronista. Mi papá, toda la vida. Nosotros éramos chiquitos y cantábamos la Marcha peronista más que el Arroz con leche.

—Es un gran referente, como mujer, como política.

—Sí. Tuve chicos que estaban en una situación económica peor que yo, para mí no es tema eso. La plata va y viene. Hoy puedo tener más yo, mañana puede tener más él. Me parece más importante salir con un chico con una profesión o con un chico que estudia, un chico que tenga ganas de superarse. Siento que podría llegar mucho más lejos que con uno que hoy tenga plata, que quizás es de los padres y no la pueda mantener el día de mañana.

—Me veo casada, con hijos. Me veo borrosa, pero porque trabajo un montón. Pero todo llega. Nunca me imaginé que iba a encontrar una persona como con la que estoy hoy, que me valora, que me potencia, que me hace sentir una reina, y que estoy segura, me da seguridad. Más allá de que puedo tirar algo fuera de lugar, porque me equivoco, como cualquiera, pero sé que tengo un hombre que no está para marcarme el error. Está: "Bueno, busquémosle la vuelta", positivo.

—Sí. Nunca competí y siempre me puse del lado de que somos todas iguales. Por ese lado me fue mejor que haciéndome la linda.

—No y me da bronca, porque si no nos cuidamos entre nosotras... Antes decía: "Nos tenemos que hacer un club de que todas nos cuidamos y nadie sale con maridos". Tenía esa locura de chica.

—Sí, fui.

—Los dos. Tuve relaciones con hombres que me hacían sufrir mucho, enfermas. Esas relaciones a veces hasta hacían cosas para darme celos. Tuve relaciones muy tormentosas.

—Sí, se puede llamar violencia, igual. Maltratos psicológicos. No llegaron a pegarme una cachetada, pero llegaron a pegarme de otra manera.

—Hace poco tuiteaste algo vinculado a la violencia de género que te trajo muchas críticas: "Hipócritas, dejen de decir lo que la gente quiere escuchar. Muchas mujeres y hombres provocan a sus ex, o contrario, para que se saquen y golpeen".

—Me criticaron, pero porque me critican. Algunos panelistas se creen que me van a enseñar a mí de ética, de moral. Se ponen en el papel de que ellos son los perfectos y es mi opinión. Yo viví una relación que me provocaban para que me saque y reaccione mal. No soy una persona violenta y tuve una relación que sacaba lo peor de mí, y no soy una persona que después tenga una relación que vaya a reaccionar igual. Y yo también he sacado lo peor de otra persona. Sé que hay otras relaciones que son iguales. No quiero decir que justifique la violencia, pero hay relaciones tóxicas, que vienen mal paridas, siguen y terminan mucho peor. Soy la primera en defender, tengo amigas que fueron golpeadas y las ayudé. A veces me aburren algunos panelistas que sacan cosas mías de contexto, hablan de mí sin saber.

—No quiero decir nada puntual, porque sé cómo trabajan algunos programas. Parte derecha del panel la defiende, parte izquierda la critica y ahí se genera la polémica. Yo lo entiendo, pero mi mamá, en el interior, no lo entiende y ve que están hablando mal de mí.

—De Susana [Giménez] o de Mirtha [Legrand]. Me encantaría. Me coparía. Las cuidaría. Mirá que yo no soy chupamedias, pero me gustaría. Son tan lindas, tan piolas. Con Susana me tomaría unas caipiroskas. Viajaría.

—Me gustan los tipos de los que puedo llegar a aprender. Si tengo que elegir a alguien, capaz que elijo a algún periodista.

—Con alguno al que le pueda preguntar cosas, con [Jorge] Lanata, ponele, una charla me gustaría. Con [Jorge] Rial también me gustaría charlar. Es hipotético.

—Sí. El último programa, me cansé. Venía haciendo zapping y todos eran informes que uno le pegaba al otro, el otro le pegaba al otro. Me cansé de ver tanta corrupción. Al final nadie hace nada, uno se envenena y queda mal toda la semana. Cambié porque me estaba haciendo mala sangre. No sé si se gana tanto con estos informes. No pasa nada. Hay informes que los hacen, los repiten y los vuelven a hacer, y no solucionan nada. No sé cuál será la manera, pero tienen que encontrar la manera para terminar.

—De la Justicia. El periodismo solo lo muestra. Pero, al final, el periodismo muestra tanto y la Justicia no hace nada. Da bronca.

—No lo descarto. Antes era un objetivo y una meta, me hubiese encantado. Ahora que tengo a mi novio que está en eso, sí daría un paso al costado y no me metería. En eso me gusta potenciar a mi pareja. Me gusta que le vaya bien, acompañarlo. Pero siempre un pasito al costado.

—Me fue mal en una materia y a mí me gusta un lado del periodismo que no encontré en el primer año de la carrera que hice. Era mucho de escribir. Me sirvió mucho porque estuve muy informada. Me encantó en un año electoral conocer a todos esos candidatos que iban a las clases. Aposté mucho a ese año. Perdí muchos trabajos, dejé de viajar a Chile.

—Sí. Más el año pasado. No me molesta haber desaprobado esa materia. Nos tomaron actualidad y yo había estudiado el caso [Alberto] Nisman en el verano. Llegué y me tomaron [Jorge] Mangeri. La verdad es que entre que el caso me parecía una asquerosidad, no me gustó escribir la nota, no tenía ganas. Ahora tengo algunos profesores que van a mi casa y leo con ellos el diario.

—Y, ahora lo veo [risas]. Estoy sorprendida con la redacción. Cómo trabajan. Todos serios. No podría haber sido periodista yo. Veo a todos inteligentes, no puedo [risas].