La cifra de muertos por la explosión que se produjo en el puerto de Tianjin este martes se elevó hasta 50, mientras que los heridos alcanzan ya 701 personas. Pero hay otro peligro que acecha a los sobrevivientes y a los bomberos que trabajan en el lugar: la contaminación con gases y líquidos tóxicos.
En un radio de 500 metros en el lugar de las dos fuertes explosiones que se produjeron en el municipio chino de Tianjín, se han detectado gases tóxicos, confirmó la agencia Xinhua.