Kicillof admitió que le preocupa que los incrementos en paritarias luego "se trasladen a los precios"

El kirchnerismo reaccionó ante las amenazas de huelga que realizaron varios sindicatos, tras la denuncia de que el oficialismo presiona a través del Ministerio de Trabajo para que no se cierren acuerdos de incrementos salariales superiores al 25%.

El encargado de alzar la voz fue Axel Kicillof, quien negó que la administración nacional pretenda ponerles un techo a las negociaciones: "No ha sido así durante 11 años y no lo va a ser en este". "Se cae de maduro que este Gobierno reinstaló las discusiones paritarias y los convenios colectivos de trabajo; para nosotros no hay nada mejor que la libre discusión de las paritarias", aseguró.

Sin embargo, segundos después el ministro de Economía decidió hacer un apunte que no hizo más que confirmar que el oficialismo está inquieto por los pedidos de aumento descomedidos.

"Quiero aclarar una cosa, al Gobierno lo que le puede preocupar es el hecho de que el empresario dice 'yo doy un aumento de 30% y luego lo paso a los precios'. Esto ya nos pasó en enero, porque traducen mecánicamente los aumentos de sueldos a los precios", reclamó.

"A nosotros nos interesa siempre proteger a los trabajadores, entonces no queremos que esto ocurra y que esta excusa sea una realidad", apuntó en un mensaje desde el palacio de Hacienda.

En el mismo sentido, Kicillof describió que los empresarios "perjudican a la gente porque le clavan aumento con cualquier excusa, cierran una paritaria y se dan vuelta para remarcar los precios, entonces el aumento se licúa".

Finalmente se quejó de que luego los medios de comunicación "le echan la culpa al Gobierno del movimiento de los precios. Y los que cambian los precios no somos los ministros, sino los empresarios".