Cientos de brasileños marcharon "por la paz" en una favela de Río

Habitantes de una comunidad del complejo Alemao, donde viven 70.000 personas, reclamaron la salida de la Policía del lugar un día después que reprimiera una manifestación y matara a un niño de 10 años

Compartir
Compartir articulo
 AFP 163
AFP 163

Varios centenares de brasileños marcharon este sábado de nuevo para "reclamar paz" en una favela de Rio, al día siguiente de una manifestación dispersada violentamente por la policía tras la muerte de un niño de diez años durante un presunto intercambio de disparos.

Según periodistas de la agencia AFP en el lugar, los habitantes de esta comunidad del complejo de favelas Alemao, donde viven 70.000 personas, mostraban pancartas blancas y reclamaban el fin de la violencia y la salida de la policía de las favelas.

La marcha pacífica estuvo encabezada por decenas de moto-taxis en una de las arterias que atraviesan este conjunto de 12 favelas. Se quejaban de los constantes intercambios de disparos entre traficantes y policías.

LEA MÁS: Francisco condenó el "silencio cómplice" ante la "furia yihadista" contra los cristianos

LEA MÁS: Los venezolanos que se escapan de la crisis: cerca de 60 se radican por mes en Uruguay

Los organizadores de la manifestación llamaron a los residentes a través de altoparlantes "¡a despertarse!, ¡a salir a la calle! para protestar contra la violencia y las víctimas de balas perdidas".

Cuatro personas, entre ellas un niño de diez años, murieron por disparos, y otras tres resultaron heridas en un poco más de 24 horas en Rio. Un fuerte dispositivo policial vigilaba la manifestación, según un videasta de la AFP.

"Esta policía asesina mató a mi hijo. Son asesinos, cobardes. Necesitamos que nos ayuden a retirarlos" de la favela, declaró a la AFP Terezinha Maria de Jesus, 40 años, madre del niño abatido el jueves, Eduardo de Jesus Ferreira.

La mujer acusa a las fuerzas de seguridad de ser responsables de la muerte de su hijo y niega que haya habido intercambio de disparos con traficantes de drogas en el momento de su muerte, como afirma la policía. El viernes la policía de Rio dispersó con gases lacrimógenos una manifestación en esa misma favela.

La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, expresó en un comunicado su "solidaridad" con los padres de Eduardo, y pidió que "se aclaren las circunstancias de esta muerte y los responsables juzgados y castigados".

El gobierno de Rio de Janeiro recuperó desde 2008 varias favelas que estaban en manos de narcotraficantes desde hacía 30 años, gracias al despliegue de 38 Unidas de Policía Pacificadora (UPP) en 264 favelas, donde viven más de un millón y medio de personas. Cerca de 10.000 policías están ya desplegados en esos territorios. Pero los narcotraficantes intentan retomar el control de algunas de esas favelas, entre ellas la de Alemao.