La novia del copiloto del A320 se convirtió en un factor clave para entender su depresión

Pocas semanas antes de la tragedia, el alemán Andreas Lubitz, de 28 años, había comprado dos autos Audi y uno era para su pareja. Fuentes cercanas a su familia dijeron que la relación estaba en crisis

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Andreas Lubitz, el copiloto de la tragedia de Germanwings, compró los dos autos Audi en un concesionario en las afueras de Düsseldorf, cerca del apartamento donde vivía con su novia. Y uno de los vehículos había sido entregado el fin de semana pasado, tres días antes de la colisión del avión en los Alpes, que dejó 150 muertos.

La revista alemana Focus relató que no sabía si el coche entregado era el que le tocaba a Lubitz o el que era para su novia. Sin embargo, pese al regalo, fuentes cercanas contaron a la prensa local que la relación de Lubitz estaba en problemas y la pareja pudo haberse separado. Esto ha sido visto como un factor que contribuye a la tragedia del A320.

La mujer, identificada luego como "María W.", se encontraría en estos momentos con su familia, mientras los investigadores alemanes realizan un trabajo forense de la propiedad en Düsseldorf. La pareja vivía en un elegante departamento en las afueras de la ciudad.

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El diario británico DailyMail tomó el testimonio de Habibalah Hassani, de 53 años, que dirige un restaurante de pizza cerca de su piso y dijo que a menudo los había visto juntos. "Eran muy agradables. Ella era una mujer amable y atractiva. Venían tal vez dos veces a la semana. Él solía ??dejar buenas propinas, era muy generoso. Me había contado acerca de su viaje a San Francisco. No los veo desde hace un par de meses".

Otro vecino que pidió no ser identificado confirmó que vivía en el piso con su novia. "Creo que ella va a estar con su familia en duelo por el momento. Es muy triste".

Los medios alemanes afirmaron que Lubitz estaba recibiendo tratamiento por depresión y le habían dado un certificado por enfermedad el día de la catástrofe.


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Los fiscales dicen que no encontraron ninguna evidencia que vincule a Lubitz con el terrorismo o cualquier forma de extremismo religioso. La búsqueda minuciosa no pudo encontrar ninguna nota de suicidio entre las docenas de cajas retiradas del apartamento y de la casa familiar de Lubitz en Montabaur.

Mientras tanto, se ha comprobado que Lubitz conocía la zona, en los Alpes, donde se estrelló el avión Airbus A320 porque solía visitar el lugar para volar con planeadores.

Dieter Wagner, miembro del club de aviadores de Montabaur, dijo que Andreas había participado en uno de sus cursos en el Alpes con su sobrina, que era un buen amigo suyo. "Era un apasionado de los Alpes e incluso obsesionado. Estoy seguro de que conocía la zona del accidente porque había volado por ahí en un planeador".

Peter Ruecker, otro integrante del club, añadió en declaraciones a la agencia AP que Lubitz parecía feliz de haber conseguido un trabajo en Germanwings, la aerolínea de bajo costo que pertenece al grupo Lufthansa. "Estaba muy feliz, daba una muy buena sensación", señaló.