El dólar oficial subió a 8,73 pesos y cayó a $13,31 el libre

El Banco Central ajustó otro centavo la paridad oficial. Cotiza a 8,73 pesos por unidad para el público y a $8,67 para las transacciones de empresas. Con pocos negocios, el marginal baja siete centavos

Compartir
Compartir articulo
 Nicolás Stulberg 162
Nicolás Stulberg 162
Bloomberg
Bloomberg

Pese a que la balanza comercial mantiene una tendencia contractiva, como mostraron ayer los resultados del intercambio con Brasil, la autoridad monetaria continúa con la estrategia de que el tipo de cambio oficial no acompañe el ritmo de suba de los costos de las empresas, y con ello limita la generación genuina de divisas por parte de los exportadores.

De ahí que tras otro miniajuste después del mediodía la paridad acumula en los últimos 30 días una suba de 1,35 por ciento, frente a dos por ciento que lo habría hecho el promedio de precios de la economía, a 8,73 pesos para el valor base de las ventas de cambio a particulares para ahorro, con el agregado del pago a cuenta de impuestos del 20 por ciento; y en 8,67 para el punto de partida de las operaciones de comercio exterior, al que se agrega la alícuota de derecho para los importadores y se le aplica las retenciones para los exportadores.

La brecha cambiaria se ubica en 52,5 por ciento

En el circuito marginal, las transacciones se pactan a 13,21 pesos para la compra y 13,31 pesos para la venta a clientes, con disminución de cinco centavos respecto del cierre previo.

Destacan los operadores que la fluidez de venta de dólares para ahorro que valida la AFIP y que ayer ascendió a 56 millones de dólares, con un promedio de más de 720 por operación, se ha constituido en un factor de oferta en el segmento blue que explica la caída de la cotización en 74 centavos desde comienzos del año.

De este modo, la brecha entre el oficial y el libre se acortó a 52,5%, mientras que con el tipo de cambio implícito a través de las operaciones con bonos y acciones dolarizados se achicó a un rango de 41,5% en el contado con liqui, que operó en 12,44 pesos con alza de 12 centavos y 44,2 por ciento en el MEP, que marcó una paridad de 12,61 pesos, dos centavos más que el cierre previo.

Inquieta la apreciación del peso

Si bien febrero comenzó con una aceleración del ritmo de devaluación diaria, al punto de acumular un aumento de la paridad en 1,35 por ciento en los últimos 30 días, el más alto desde fines de septiembre, los analistas destacan que se trata de una acción insuficiente para devolver competitividad a la producción nacional.

"El BCRA comenzó a imprimir en enero una leve aceleración al ritmo de devaluación del peso, después de haber mantenido el tipo de cambio oficial virtualmente congelado durante diciembre. Sin embargo, puesta en perspectiva, la devaluación sigue siendo muy moderada (1%) y compatible con la estrategia oficial de utilizar al tipo de cambio como un 'ancla' antiinflacionaria, la cual busca recomponer el poder de compra de los salarios y apuntalar el consumo de cara a las elecciones", observan los economistas del Banco Ciudad.

El tipo de cambio se sigue utilizando como ancla de la inflación

Observan los técnicos del Ciudad que "el costo de esta estrategia es una mayor apreciación del peso en términos reales, situación que se ve agravada por la fortaleza del dólar a nivel global. El tipo de cambio real bilateral se encuentra hoy un 5% más apreciado que en diciembre de 2013 y un 7% más que en diciembre de 2001, habiéndose diluido la ganancia de competitividad cambiaria de comienzos del año pasado".

Además, los economistas en el informe semanal del Banco Ciudad que "medido contra la canasta de monedas de nuestros principales socios comerciales, el tipo de cambio real se apreció un 11% desde fines de 2013 y el bilateral contra el euro lo hizo en un 24%, alcanzando su nivel más bajo en 13 años. Esta dinámica perjudica a las firmas exportadoras y, sobre todo, a las economías regionales, poniéndole un techo a la potencial recuperación económica. Esta evolución, a su vez, resulta particularmente negativa en presencia de un fuerte y creciente desequilibrio fiscal, que actúa como un claro factor desestabilizador de dicha estrategia".