La carta de Pachter y la trastienda de la primicia de la muerte de Nisman

Compartir
Compartir articulo
 @JohninJerusalem 162
@JohninJerusalem 162

El periodista que confirmó por Twitter la noticia de la muerte de Alberto Nisman se encuentra desde hace diez días en el centro de la escena mediática: el nombre de Damián Pachter inicialmente cobró relevancia por la difusión de un dato impactante, pero se potenció tras anunciar que se iba del país debido a que era perseguido por agentes del gobierno nacional y sentía que su vida corría peligro.


Al escándalo que generaron su denuncia y la decisión de autoexiliarse se le sumaron rumores sobre un enfrentamiento que habría mantenido con sus compañeros del diario Buenos Aires Herald por haber confirmado la noticia por las redes sociales y no en el medio para el que trabajaba.


En ese contexto, el periodista decidió escribir una carta para aclarar que nunca tuvo inconvenientes con sus colegas. "Jamás tuve problemas con mis editores. El Grupo (Ámbito) me dio la posibilidad de escribir sobre los temas vinculados con Israel, y esto no es un dato menor. Gracias a su decisión, logré proyectarme como periodista, utilizando mi experiencia personal y acumulando varios artículos sobre el tema", destacó el cronista desde la ciudad de Tel-Aviv, donde reside desde el domingo.


La misiva fue dirigida al periodista Pablo Jiménez, director de contenidos digitales de Ambito.com y de BuenosAiresHerald.com, quien, como antiguo jefe de Pachter, decidió hacerla pública y contó además cómo se manejo el dato de la muerte del ex fiscal especial para la causa AMIA.


infobae

"Pasada la medianoche del domingo 18 uno de los subeditores de Ambito.com me llamó al celular. Yo me encontraba de vacaciones. Me alertó del tuit de Damián. Inmediatamente lo llamé", relató Jiménez en un artículo publicado esta mañana.


El ex jefe de Pachter apuntó que "hasta ese momento la información de la muerte del fiscal Alberto Nisman sólo se empezaba a desparramar tibiamente en Twitter. Le pedí que me cuente lo que sabía y le expliqué que no estaba de acuerdo con que haya tuiteado semejante noticia, sino que lo correcto hubiera sido publicarla en los medios del Grupo, ya que le hubiera dado una fuerza y credibilidad inmediata".


"Desde ese momento comenzamos a trabajar toda la noche. Ninguno de los dos durmió. Tampoco lo hizo gran parte de los periodistas que fueron convocados de urgencia a la redacción", destacó.


Finalmente Jiménez admitió que a la gente del Buenos Aires Herald sí la tomó por sorpresa que Pachter denunciara en Infobae que era perseguido y que por eso había decidido irse de la Argentina, porque ninguno de sus compañeros estaba al tanto del mal momento que estaba viviendo.


"Desde el viernes las autoridades del Grupo y sus compañeros siguieron con máxima preocupación lo ocurrido con Damián y se accionó al respecto. Él lo sabe y lo agradeció", aclaró el hombre de Ámbito. "El lunes pudimos tener una charla telefónica. Me explicó que como habló tantas veces conmigo creyó que si me informaba sobre sus pasos me iba a comprometer", apuntó.


 Adrián Bono 162
Adrián Bono 162

La carta de Pachter


27 de enero, Tel-Aviv, Israel.


A la dirección del Grupo Ámbito,



Tras reiteradas versiones sobre una supuesta mala relación entre quien les habla y el Grupo Ámbito, editora de Buenos Aires Herald, escribo estas líneas con el objetivo de poner las cosas en claro.



Jamás tuve ningún problema vinculado a lo laboral con mis editores directos en la web Pablo


Jiménez ni Soledad Ytuarte, quienes tomaron la decisión de incorporarme al equipo de


BuenosAiresHerald.com en julio de 2013. Siempre, y hasta el día de la fecha, la relación fue y es excelente. Tampoco con los editores del papel con quienes colaboré en algunas ocasiones.



El Grupo me dio la posibilidad de escribir sobre los temas vinculados con Israel, y esto no es un dato menor. Gracias a su decisión, logré proyectarme como periodista, utilizando mi experiencia personal y acumulando varios artículos sobre el tema.



Ubicándonos en un plano más actual, es cierto que discutí con Pablo telefónicamente tras la publicación de mis tuits. ¿Conocen algún editor que jamás haya discutido con uno de sus redactores? En tal sentido, yo me disculpé con Pablo porque quien respondió mal durante una charla fui yo. Entendí su punto y todo quedó fuera de discusión en cuestión de minutos.



También es cierto que durante las 24 horas previas a mi forzada salida del país prácticamente no hablamos. Esto tiene una explicación muy simple: yo estaba bajo seguimiento, tanto físico como telefónico y no quería perjudicar a terceros con los que había hablado toda la semana.



Fue mi decisión cortar el diálogo durante ese periodo de tiempo porque temía que le ocurriera algo a aquel que hable conmigo. Ayer he conversado con mi editor por primera vez desde mi salida forzada de la Argentina y quedó todo más que claro.



Aprovecho este espacio para agradecer a las autoridades del Grupo Ámbito por comprender mi situación. De hecho mi intención es mantener el vínculo.



Agradeceré siempre a editores y compañeros. En primer lugar por incorporarme a su equipo, y en segundo por dejarme crecer, algo que hoy en día no es tan común en nuestro ambiente.



Con el fin de despejar la situación, les agradezco a todos nuevamente las manifestaciones de solidaridad y comprensión, y espero que a través de estas líneas culminen las falsas declaraciones vinculadas a la relación con mis editores y con la empresa.



Atentamente,



Damián Pachter.