Piketty: "El Gobierno quiere ser progresista, pero no reforma el impuesto a las Ganancias"

"Si se quiere que más gente tribute, se tiene que fundamentar el por qué y no dejar que lo haga la inflación. No puede ser que solo la inflación decida quién paga qué. Hay que ajustar las categorías impositivas con la inflación, porque no es lo mismo ganar 20.000 dólares al año que ganar 100.000". Ese fue el diagnóstico del economista francés Thomas Piketty al ser consultado por el impuesto a las ganancias en el país durante una conferencia de prensa en Buenos Aires, de la que participó Infobae.

De esta forma, remarcó que el gobierno de Cristina Kirchner "quiere ser progresista, pero no introdujo ninguna reforma al impuesto a las ganancias" y sostuvo que debería haber cambios "para alcanzar un sistema tributario progresivo". Subrayó también que en la Argentina falta transparencia sobre el ingreso, la riqueza, el capital y la inflación, "que puede tener enormes consecuencias en la distribución y la desigualdad, porque afecta a los sectores más frágiles de la sociedad".

De visita esta semana en la Argentina, Piketty fue recibido el viernes por el ministro de Economía Axel Kicillof y el presidente del Banco Central Alejandro Vanoli, donde obtuvo el compromiso manifiesto del Gobierno para facilitar los datos fiscales históricos y así poder hacer un análisis más exhaustivo del cuadro económico del país. Antes, a su paso por Chile, Michelle Bachelet también mantuvo un encuentro con él.

Es que Piketty es la estrella del momento en el mundo de la economía. Le llueven calificaciones como "rock star", se lo ha comparado con el mismísimo Karl Marx y su libro El capital del siglo XXI está catalogado como un auténtico best seller, clasificación que hasta ahora parecía estar reservada a novelas de Tom Clancy o George R.R. Martin. En las 600 páginas de su trabajo -editado en español por el Fondo de Cultura Económica- repasa la distribución de la riqueza a lo largo de la historia y vaticina que este siglo será más desigual que el anterior si no se adoptan determinadas medidas. "El libro es muy accesible, disculpenmé si es largo, pero lo puede leer cualquiera", aclara.

Su nombre, además, suena como posible candidato al Premio Nobel de Economía, aunque tenga sus detractores. Desde la derecha, lo ven demasiado a la izquierda con su propuesta de un impuesto al capital global para contribuir a reducir las desigualdades. Del otro lado de la escala política, arguyen que su discurso es superficial y que no explora las causas estructurales de la pobreza. Él, por su parte, afirma que su teoría va más allá del clivaje izquierda-derecha.

Invitado por la Fundación OSDE, el FCE y el Institut Français d'Argentine, Piketty señaló en la rueda de prensa que las reformas tributarias y el acceso a la educación son la principal vía para que las sociedades sean más igualitarias. Por eso, insistió en que tanto la Argentina como el resto de los países de América Latina deben "transparentar cómo construyen sus datos económicos", porque hasta entonces se estará "subestimando" la verdadera medida de la desigualdad en la región.

Piketty: "La reforma tributaria y la educación son la fórmula contra la desigualdad"

El profesor de la Escuela de Economía de París indicó que la alta desigualdad es el problema central de América Latina y sugirió que una "mayor integración" serviría para regularla mejor. También destacó la reforma impositiva de Chile por ir en la "dirección correcta". El nuevo sistema tributario chileno, cuyos fundamentos fueron construidos en buena medida a partir de los principios desarrollados por Piketty, apunta a una mayor recaudación para financiar la educación pública en todos los niveles.

Por otro lado, el especialista francés defendió a la Argentina en relación con el litigio con los hold outs. "Cuando uno tiene una deuda pública superior al Producto Interno Bruto (PIB) necesita cierta reestructuración para poder pagarla. Alemania nunca devolvió su deuda después de la Segunda Guerra Mundial; si no, todavía la estaría pagando", aseguró. En ese sentido, elogió la iniciativa argentina ante la ONU para crear un marco jurídico sobre la reestructuración de las deudas y dijo que el sistema jurídico de los Estados Unidos se impuso de forma "arbitraria e inaceptable".

Sin embargo, recomendó a la Argentina ser "cauto" con la salida al mercado de capitales, uno de los objetivos por los que se reestructuró la deuda. "Lo más importante es el ahorro local y la regulación del capital a nivel interno. No digo que no se usen flujos externos, pero debe hacerse con moderación porque se genera volatilidad cuando los inversores quieren irse. Se puede generar conflicto, con la tentación de expropiar", advirtió.

"La desigualdad es difícil de regular y cada país tiene que buscar la forma de que su desigualdad sea tolerable, porque cuando es extrema hay inestabilidad. En la Argentina, como demuestra la experiencia, acrecentar la deuda externa no es una buena idea. Espero que el país use esto con moderación", agregó el economista.

Por último, Piketty analizó el impacto que tendrá la caída del precio del petróleo en las economías emergentes: "A corto plazo, muchos países quedarán en una situación desventajosa, pero hay que apuntar a la economía post commodities. La convergencia entre los países de ingresos bajos, medianos y altos es un proceso que va a continuar a largo plazo aunque cambie el valor de las commodities. Por eso, los emergentes tienen que invertir en otras formas de acumulación de capital".

Tras su paso por Santiago de Chile, Piketty llegó a Buenos Aires al final de esta semana, donde además de entrevistarse con funcionarios argentinos ofreció una conferencia magistral en la Fundación OSDE. Estará hoy, sábado, en El Ateneo Grand Splendid (Santa Fe y Callao) firmando ejemplares de su libro y hablando con el público a las 19 horas.