Una mujer embarazada volvió a ser blanco de una salidera bancaria. Esta vez ocurrió en Banfield. Los delincuentes lograron hacerse con el dinero y no hubo que lamentar heridos. "No se me cruzó el caso de Carolina Píparo por la cabeza", indicó la víctima, Noelia Chessari, en diálogo con el canal TN.
Chessari contó que dos delincuentes le cruzaron el auto a unas 15 cuadras de la sucursal del Banco Provincia a donde había retirado dinero con su madre. "Me encañonaron por la ventana y me hicieron abrir la puerta. Me apuntaron a la panza", relató.
La mujer no dudó en entregar lo que los agresores le reclamaban. "Dame toda la plata que te botonearon del banco", le dijeron. Para ella no hay dudas: estaba "marcada", su caso era específico e incluso sabían que estaba embarazada.
El calvario de Noelia continuó en la comisaría a la que fue a hacer la denuncia. "Te da bronca cuando vas a las policía y ni bola. Nada", lamentó. "Estuve dos horas y no tenía nadie adelante y no me atendían. Yo me sentía mal, tenía contracciones, y no me dieron ni un vaso de agua", dijo. Agregó, además, que un efectivo les dijo que debían agradecer "por estar vivas".
Chessari dijo que requirió las grabaciones de las cámaras de seguridad de la zona, que a su entender serían de mucha utilidad para dar con los responsables. Pero acotó que en la comisaría le adelantaron que iba a tener que esperar tres meses porque no había fiscales por la feria judicial.
Mencionó, además, que entre las pertenencias que le robaron estaba su teléfono iPhone, que dispone de un sistema para saber su ubicación, y que los policías no supieron cómo utilizar esa ventaja. "La policía nuestra no está preparada, no está educada", indicó.