El sorpresivo viaje de Máxima Zorreguieta a la Argentina

La reina de Holanda pasó por Buenos Aires para visitar a su padre, que se encuentra gravemente enfermo

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Un problema familiar motivó una visita relámpago de Máxima Zorreguieta a la Argentina: la monarca estuvo apenas 36 horas en el país para visitar a su padre Jorge, quien está seriamente afectado por una leucemia.

La reina de los Países Bajos llegó a Buenos Aires durante la mañana del sábado pasado; tras viajar acompañada por un grupo de escoltas, pisó tierra y se dirigió directamente a la clínica Fundaleu, donde su familiar permanece internado en grave estado.

Durante casi toda su corta estadía permaneció en el centro asistencial ubicado en el barrio porteño de Recoleta; el domingo por la tarde, un día después se su arribo al país, abordó un vuelo comercial de la compañía francesa Air France que la llevó nuevamente al continente europeo.

La salud de Jorge Zorreguieta empeoró en los últimos tiempos y provocó que su hija emprendiera un nuevo viaje sorpresa a la Argentina; en septiembre también había venido de visita, pero por un motivo mucho más grato: llegó para celebrar el 70º cumpleaños de su madre.

Por su pasado como ministro de la dictadura militar argentina (fue secretario de Agricultura), el parlamento holandés decidió vetar la presencia del padre de Máxima en los grandes acontecimientos reales e incluso familiares.

Por esa razón, ni él ni su esposa, María del Carmen Cerrutti, asistieron a la boda de la reina con Guillermo Alejandro, celebrada el 2 de febrero de 2002 en Ámsterdam. De modo excepcional fue autorizado a estar en el bautizo de su nieta Alexia, en 2005.