El obispado de San Isidro informó que el papa Francisco expulsó al presbítero José Mercau, que fue condenado a 14 años por la Justicia por el abuso de cuatro chicos que tenía a su cargo en el hogar San Juan Diego en El Talar. El Sumo Pontífice sancionó a Mercau con la dimisión del estado clerical, por lo que perdió en forma automática todos los derechos del ejercicio sacerdotal, entre ellos celebrar misa y administrar los sacramentos.
Las víctimas tenían entre 11 y 14 años cuando realizaron las denuncias en 2005 y vivían en el hogar donde trabajaba Mercau, quien fue condenado por los delitos de "corrupción de menores reiterada, en concurso real con abuso sexual mediante acceso carnal agravado".
El vocero diocesano, sacerdote Máximo Jurcinovic, sostuvo que ante el impacto mediático del caso el obispo de San Isidro, monseñor Oscar Ojea, quiso "comunicar esta decisión de Francisco, de modo claro y a todos los fieles de la diócesis".
Asimismo, recordó que "ya en diciembre pasado el obispo realizó un pedido de perdón público a las víctimas". En aquella oportunidad monseñor Ojea pidió "públicamente perdón a los jóvenes que han sido afectados por estas conductas realizadas por un sacerdote de nuestra diócesis, el padre José Mercau, cuando era párroco de San Juan Bautista, en Ricardo Rojas, partido de Tigre".