Un gremialista cercano al Gobierno conducirá Luz y Fuerza

El chaqueño Guillermo Moser se impuso en las elecciones para secretario general del estratégico sindicato, conducido durante 28 años por Oscar Lescano, fallecido en septiembre de 2013

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Con un discurso de tono federal, el chaqueño Guillermo Moser se impuso este mediodía en Mar del Plata en las elecciones para secretario general de la Federación de Trabajadores de Luz y Fuerza, una de las organizaciones sindicales más poderosas de la Argentina. De esta manera, se convirtió en el sucesor del histórico jefe de ese gremio Oscar Lescano, muerto hace poco más de un año. En un hecho infrecuente para el sindicalismo, acostumbrado a las listas únicas, Moser se impuso a Julio Ierasi, a quien de este modo desalojó de la jefatura lucifuercista a partir de hoy mismo.

Moser, de 55 años, era hasta hoy el segundo de la Federación y secretario general de la estratégica seccional Mercedes, desde donde tiene el control del paquete energético de parte de Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba. Ieraci llevaba dos décadas al frente de la Federación, pero por voluntad de Lescano, que gobernaba el gremio desde la seccional Capital.

El triunfo de Moser, que comenzó su carrera gremial en Agua y Energía, también supone un revés para el líder de la seccional Capital de Luz y Fuerza (la más influyente), Rafael Mancusso, que apoyaba a Ierasi. La victoria del dirigente chaqueño fue amplia: obtuvo el apoyo de 96 delegados, mientras otros 67 dieron su voto al candidato derrotado. El Gobierno aguardaba impaciente el resultado de esta elección dado que es un sector, el energético, fuertemente subsidiado, en el que se desembolsaron muchas inversiones durante los últimos años.

"Con el fin de un ciclo que se veía venir, comienza una nueva era en Luz y Fuerza. Nuestra primera tarea será reposicionar al gremio donde nunca debió haber dejado de estar", dijo Moser a Infobae apenas consumada su victoria en el hotel 13 de Julio de Mar del Plata, donde se realizaron las deliberaciones de Luz y Fuerza (tiene 60 mil afiliados), que comenzaron el lunes y que acabaron hoy con la elección de un dirigente que era el favorito de los delegados provinciales.

El ganador era en verdad era el sucesor "in pectore" que tenía Lescano para que lo sucediera. El flamante secretario general se define también como lescanista y manifiesta su apoyo al gobierno de Cristina Kirchner. Con todo, es difícil asegurar que su triunfo haya caído a la medida de lo que quería el ministro de Planificación, Julio de Vido.

El triunfo de Moser se comenzó a configurar anoche cuando su sector se hizo fuerte en la comisión de poderes y en la junta electoral del evento. Bastante antes de la elección, algunos supusieron que el nuevo jefe de Luz y Fuerza se inscribiría en la CGT de Moyano, pero no. El gremio, como hasta acá, permanecerá en la central que orienta del metalúrgico Antonio Caló. Moser no tiene más que palabras de elogio para la gestión kirchnerista: "Este Gobierno mejoró la matriz energética, tanto es así que la Argentina está hoy en condiciones de afrontar una crisis", dice.

El sucesor de Lescano edificó su triunfo en el apoyo que le brindaron fundamentalmente las seccionales del interior del país, a las que fue visitando una a una los últimos tiempos. En las deliberaciones previas a la elección, apuntó contra el mutismo en el que se enfrascó la dupla Ierasi-Mancuso y habló de revertir esta etapa de "oscurantismo", según definió la actualidad de Luz y Fuerza.