Cambio climático: el mundo en alerta verde

Más de 160 países fueron escenario de manifestaciones para exigir medidas urgentes contra el cambio climático que representa una amenaza global. Participaron no sólo miles de ciudadanos sino que también celebridades como Leonardo DiCaprio, Sting y Peter Gabriel en apoyo al reclamo.

DiCaprio, quien desde desde hace 15 años invierte dinero en la en la protección del medio ambiente, dirigió un fuerte discurso a los líderes mundiales en la cumbre de la ONU, en Nueva York: "Como actor, yo finjo para ganarme la vida. Creo que la gente ve al cambio climático de la misma manera, como si fuese ficción. Pero ahora todos sabemos que no es así". Además, aseguró que resolver los problemas del cambio climático no es una cuestión de política, sino de supervivencia. ¿De qué se trata este alerta verde?

La Organización de las Naciones Unidas ya había advertido a comienzos de año sobre el impacto "grave, generalizado e irreversible" del calentamiento global y es por eso que se agendó como tema central de la cumbre que se está llevando a cabo en Nueva York y que buscará un acuerdo internacional, firmado por todas las naciones, para fines de 2015.

¿Por dónde empezar el cambio? Según explica el investigador y Presidente de la Fundación Códigos Luis Seguessa, a Infobae, "hay que dejar de colocar el foco del problema en las emisiones de gases para comenzar a estudiar el problema de consumo de oxígeno. Que se realice definitivamente un cambio de tecnología en la propulsión del transporte".

Seguessa coloca la alerta sobre futuros problemas debido al consumo de oxígeno por parte de los motores a combustión interna, convocando a un cambio de mentalidad y de tecnología en la movilidad en el transporte para "recuperar el equilibrio perdido".

"El lanzamiento del 1º Campeonato Mundial de Fórmula E este fin de semana en Beijing es una prueba de que los autos eléctricos de altas prestaciones son posibles", remarca sobre lo que se considera "el futuro de la industria automotriz": los coches eléctricos.

"El problema del cambio climático, y los cataclismos es que hay que medirlos en progresión geométrica y no aritmética como se ha hecho hasta ahora, porque en la medida que la población automotora mundial siga creciendo, dichos fenómenos también lo harán. Solo así entenderemos la gravedad del asunto y nos daremos cuenta que es por esta razón que todo esta sucediendo mucho antes de lo previsto. Los autos eléctricos hoy ya son una realidad. Nos queda poco tiempo y se tendrán que tomar importantes decisiones en materia ambiental por el bien de las futuras generaciones y de nosotros mismos", concluye Seguessa, quien investiga desde hace más de 25 años el fenómeno del cambio climático.

Por su parte, el encuentro celebrado en Nueva York con 125 jefes de estado y de gobierno, es el primero desde la fracasada conferencia sobre el clima realizada en Copenhague en 2009.

El "abrumador" impacto global

El último documento elaborado por el II Panel Intergubernamental de la ONU sobre Cambio Climático (IPCC) fue contundente acerca de este proceso climatológico al analizar sus efectos sobre el hombre y sobre la naturaleza en todas las regiones del planeta desde la actualidad hasta el año 2100.

"Antes, pensábamos que sabíamos que esto estaba pasando, pero ahora tenemos pruebas contundentes de que está ocurriendo y es real", afirma el doctor Saleemul Huq, autor principal de uno de los capítulos.

El informe, que fue redactado durante una semana en Yokohama (sur de Tokio) por cerca de 500 expertos internacionales, recoge al menos 120 impactos en los seis continentes que se atribuyen total o parcialmente al cambio climático.

Entre ellos hay "eventos climáticos extremos" como olas de calor, tifones, lluvias torrenciales, inundaciones, sequías y cambios en los patrones migratorios de diversas especies animales, como explicó el vicepresidente del panel de la ONU, Vicente Barros.

También, un descenso del rendimiento agrícola que "se observa en regiones como el Sur de Europa o Sudamérica", y sobre todo en cultivos como el maíz o el trigo, según Barros. Pero las mayores consecuencias del cambio climático sobre la seguridad alimentaria se observarán en zonas como África o el Sudeste asiático, "donde la población rural hace en su mayor parte una economía de subsistencia".

"Esto afectará a cientos de millones de personas si no hacemos nada. El mundo debe tomarse este informe muy en serio".