En una competencia llena de alternativas desde la primera hasta la última vuelta, Daniel Ricciardo pudo aguantar el desgaste de sus neumáticos y se quedó con la victoria en el circuito de Spa Francorchamps en la duodécima fecha del mundial.
La competencia empezó de manera accidentada antes de que se pusiera en verde el semáforo. En la grilla de partida, el sistema neumático de la Ferrari de Fernando Alonso se trabó y el auto quedó suspendido en el aire, mientras los demás competidores iniciaban la vuelta previa.