La base monetaria volvió a marcar una expansión récord

En junio y julio, el Banco Central abandonó la política de contracción de billetes en circulación y reforzó el giro de pesos al Tesoro para cubrir el déficit fiscal. En 40 días se emitieron $41.398 millones

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 Télam 162
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La economía argentina se debate entre la inflación y la recesión. Las medidas oficiales para desacelerar la suba de precios, como la absorción de liquidez y la suba de tasas, son un obstáculo para incentivar la actividad económica, porque disminuyen la cantidad de dinero en circulación y encarecen el crédito.

Junto con la fuerte devaluación de enero, el Banco Central llevó las tasas de interés para la colocación de Letras (LEBAC) al filo del 30% anual. Este incremento, cuya lectura de mercado es la previsión oficial de inflación para los doce meses siguientes, impulsó a las entidades financieras a entregar pesos en cartera a esa tasa de referencia.

Al promediar el año el Banco Central abandonó la contracción monetaria que había logrado imponer entre enero y mayo, sustentada por un incremento de las tasas. Mientras que en todo 2013 la Base Monetaria se expandió $69.845 millones (un 30,1%, a $377.196,5 millones), con las colocaciones de deuda de la entidad este año se había reducido $28.268 millones entre enero y mayo (a $348.928,3 millones).

Así, en relación a mayo de 2013 la creación de dinero se había desacelerado a un 17,5% interanual, casi la mitad que la tasa de inflación, lo que significó una reducción de circulante en términos reales.

Un estudio realizado por el economista Luis Secco, de la consultora Perspectivas Económicas, indicó que durante todo junio y hasta el 11 de julio, la Base Monetaria creció $41.398 millones, con lo cual, la contracción monetaria hasta mayo se revirtió a una expansión de $18.810 millones en el transcurso del año.

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En una comparación similar, en base a las planillas del Banco Central, la Base Monetaria al 31 de diciembre de 2013 ascendía a $377.196,5 millones entre la circulación monetaria (billetes, monedas y cheques cancelatorios en pesos) y los depósitos en cuentas corrientes. Al 15 de julio último, la Base Monetaria alcanzaba a $391.644,3 millones, que implican un aumento de 3,8% o $14.447,8 millones desde enero. En la comparación interanual, frente a los $327.672,7 millones del 15 de julio de 2013, significa un aumento de 19,5 por ciento.

El aumento de Base Monetaria de $41.398 millones supera a la emisión de $40.351 millones de diciembre de 2013. Aquel volumen de pesos inyectado a la economía al cierre del año pasado fue uno de los motivos por los cuales la inflación de enero y febrero marcó un pico que no se observaba desde 2002. El IPC Nacional Urbano del INDEC marcó un aumento del 3,7% en enero y 3,4% en febrero. Según el Índice Congreso, la suba de precios minoristas promedió 4,6 y 4,3 por ciento, respectivamente.

Un estudio del Centro de Investigaciones Sociales y Económicas (CISE), entidad que dirige Alejandro Bongiovanni, señala que al considerar la Base Monetaria ampliada o M3 -que comprende el circulante en poder del público, los cheques cancelatorios en pesos y el total de depósitos en pesos del sector público y privado no financiero- "el crecimiento de la base monetaria ocurrido durante el mes de junio es el mayor en el año, e incluso superior al de diciembre de 2013, cuando se incrementó fuertemente dando lugar, unas semanas después, a una abrupta devaluación".

"Las causas de la expansión monetaria en el mes de junio, pueden encontrarse en la necesidad de financiamiento del sector público, ya que se destinaron $12.511 millones de pesos para dicho motivo, $8.844 millones más que los necesarios en el mes de mayo", indica el informe de CISE. "Junto con esta expansión monetaria vía sector público, puede notarse que bajó la absorción de pesos por parte de la máxima autoridad monetaria vía esterilización monetaria, por lo que ambos componentes generaron un considerable aumento de la base monetaria en junio", agrega el estudio.

Asistencia al Tesoro

La deuda del Banco Central en LEBAC y NOBAC se redujo entre junio y julio unos $10.490,4 millones, desde los $206.598,9 millones del 31 de mayo a los $196.108,5 millones del 15 de julio. Esto significa que la entidad que preside Juan Carlos Fábrega canceló vencimientos por encima de los montos licitados en esas seis semanas. Asimismo, otros $10.426 millones fueron utilizados por la entidad monetaria en junio y los primeros días de julio para comprar dólares en el mercado mayorista. En este caso se trata de emisión genuina, respaldada en divisas.

Estos dos conceptos suman unos $20.916 millones, prácticamente la mitad de los $41.398 millones de expansión monetaria de junio y julio, por cuanto se deduce que la otra mitad en su mayor parte se destinó para asistir financieramente al Tesoro, en un período de pago del medio aguinaldo y de un incremento de la masa salarial del sector público por la incidencia de las paritarias.
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