La tranquilidad de la localidad correntina de Paso de los Libres se vio alterada el mediodía del 15 de julio pasado, cuando dos aviones Pampa de la Fuerza Aérea Argentina (FAA) persiguieron a una avioneta narco que sobrevoló sin permiso el cielo de la provincia mesopotámica.
La aeronave, que provenía de Paraguay, fue detectada por el radar de FAA que se encuentra ubicado en Posadas (Misiones) e inquietó a los responsables de seguridad. "Pasados los minutos y al haberse agotado los pasos de identificación, el vuelo fue declarado como Tránsito Aéreo Irregular (TAI); de inmediato se le ordenó a dos aviones IA63 Pampa que la intercepten y se informó a la Gendarmería Nacional", detalló la cartera castrense.
Allí comenzó el operativo para perseguir a una avioneta que fue identificada como un monomotor de planos altos, color blanco con franjas azules, de marca Cessna 210.
Tras unas maniobras de intimidación, los pilotos de la aeronave que provenía de Paraguay "decidieron arrojar paquetes con 154 kilos de cocaína que cayeron en un campo cercano a la estancia de Las Tres Marías", contó Raúl Tarabini, intendente de Paso de los Libres.
Una vez que descartaron la droga, los narcotraficantes decidieron retornar a Paraguay. Y el dirigente político correntino explicó que pudieron hacerlo sin problema porque "al no existir una Ley de Derribo que los ampare, los efectivos que participaron en el operativo sólo pudieron intimidar" a los malvivientes.
Luego de un intenso rastrillaje, la gente de Gendarmería encontró la droga en los campos y -contó Tarabini- determinó que "el destino de la cocaína era Uruguay y la provincia de Mendoza, porque los paquetes tenían identificación".
Tras la intervención de la titular del Juzgado Federal de Paso de los Libres, Mabel Borda, se labraron las actuaciones de rigor y se procedió al traslado de la sustancia incautada.