Ya no es más su "segundo padre"... La causa del enojo de Riquelme con Bianchi

Fue allá por 1998 cuando entre Román y el 'Virrey' comenzó a forjarse un lazo afectivo que se iría fortaleciendo con el correr de los años. El DT no sólo fue la guía del '10' dentro del campo de juego, sino también fuera de él. Sin embargo, pese a que el propio enganche repitió hasta el hartazgo que en Bianchi era como su papá, algo pareció haberse roto luego de las duras e inesperadas palabras que tuvo en su presentación en Argentinos. CONOCÉ EL MOTIVO Y RECORDÁ LA ESTRECHA RELACIÓN ENTRE ELLOS

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"De Bianchi no hablo. Desde ahora, el mejor técnico lo tengo a mi derecha (por Borghi)". Esa fue la frase que el explosivo Juan Román Riquelme lanzó en medio de su presentación como flamante refuerzo de Argentinos Juniors y que 'lastimó' los oídos de los fanáticos 'xeneizes'. A lo que el 'Virrey, luego de vencer a Nacional en un amistoso de pretemporada, respondía: "Está bien, es una declaración honesta. Él dice lo que siente".
Riquelme no habló de Bianchi
Fue allá por 1998 cuando entre Román y el 'Virrey' comenzó a forjarse un lazo afectivo que se iría fortaleciendo con el correr de los años. El DT no sólo fue la guía del '10' dentro del campo de juego, sino también fuera de él. Sin embargo, pese a que el propio enganche repitió hasta el hartazgo que en Bianchi era como su papá, algo pareció haberse roto luego de las duras e inesperadas palabras que tuvo en su presentación en Argentinos. CONOCÉ EL MOTIVO Y RECORDÁ LA ESTRECHA RELACIÓN ENTRE ELLOS

Sí, inesperado cruce verbal se estaba dando entre dos protagonistas que supieron forjar el más estrecho de los lazos, al punto de considerarse como 'padre e hijo'. Fue allá por 1998, cuando Bianchi desembarcó en la entidad de La Ribera para hacerse cargo de la conducción técnica, que comenzó todo. El enganche, por ese entonces con escasos 20 años, había sido algo relegado por el anterior DT (Héctor Veira) y fue Bianchi que decidió devolverle la titularidad y otorgarle la responsabilidad de llevar el '10' en su espalda para convertirse en el conductor de un equipo que lo ganaría todo.

Mientras el 'Virrey' se iba transformando en una especie de 'guía futbolística' de Román y juntos sumarían títulos al por mayor (Clausura 1999, Apertura 2000, Libertadores e Intercontinental 2000 y Libertadores 2001), también fue un gran 'bastión' para el enganche en uno de los momentos más duros de su vida: el secuestro de su hermano Cristian de tan sólo 18 años. Siendo el propio Riquelme quien se encargó de llevar adelante las negociaciones para la liberación (le pedían 300 mil dólares), el propio DT se comunicó con su dirigido para ofrecerle su ayuda (incluso económica). Tras casi 30 horas, el futbolista logró reencontrarse con su hermano y el gesto de Bianchi quedaría marcado de por vida en Román.



Aunque el destino futbolístico los separaría por un tiempo (Riquelme partió al Viejo Continente para jugar en Barcelona primero y en Villarreal después), la relación entre ellos no sufriría ninguna quiebra. Tal es así que cada vez que podía, el ídolo 'xeneize' se deshacía en elogios para con el 'Virrey' y no dudaba en señalarlo como un "segundo padre" para él. Asimismo, mientras él ya se había alejado del club de sus amores luego de perder la Final de la Liberadores 2012 aduciendo que estaba "vacío" y no podía "darle más nada a Boca"; también pedía públicamente que Bianchi no retornara a Boca para no dañar su imagen.


Aunque Riquelme le "apostaba un asado" a la prensa asegurando que Bianchi no volvería a Boca, el entrenador sorprendió y aceptó ser el sucesor de Julio César Falcioni. Tras haber asumido en diciembre de 2012, el 'Virrey' no dudó en reconocer públicamente que hablaría con el enganche para convencerlo de que volviera a 'ponerse los cortos'. El DT anhelaba volver a contar con su 'hijo pródigo' en busca de revivir la época dorada.


Pese a que su 'padre' intentaba seducirlo, Román se presentaba en el inicio del ciclo de Bianchi en Casa Amarilla sólo para avisarle que no 'torcería su decisión'. Sin embargo, luego de ver el pálido desempeño del 'Xeneize' durante la pretemporada, el '10' levantó el teléfono y le dijo al 'Virrey' que retornaría para "sufrir juntos"


De allí en más, aunque los éxitos les fueron esquivos, las muestras de cariño y los elogios entre ellos se repetían en cuanta ocasión fuera posible. Si el '10' se lesionaba, el técnico no titubeaba al momento de tener que respaldarlo públicamente y avisar que jugaría cuando él lo creyera conveniente. Al mismo tiempo, cuando se produjo la escandalosa pelea interna entre Augustín Orion y Pablo Ledesma, el capitán salió a emitir un comunicado junto al DT, aprovechando para volver a remarcar: "Bianchi es como mi papá, sépanlo. Y no tengo vergüenza de decirlo".



Ya durante el último semestre, cuando la renovación de Riquelme pasó a ser el tema central en el 'Mundo Boca', todo pareció comenzar a cambiar. Es que cada vez que el 'Virrey' afrontaba una conferencia de prensa (habitualmente post partido) y era consultado por la situación del ídolo, él esquivaba el tema y se limitaba a aclarar que de eso no hablaría. Aunque la intención de Bianchi no era otra más que cuidar a su capitán y no insertarlo en un debate público, dicha actitud no fue tomada de la mejor manera por el '10', quien comenzó a molestarse al considerar que su 'papá' no estaba haciendo la suficiente fuerza para que él siguiera vistiendo la 'Azul y Oro'.

Bianchi no quiere hablar de Riquelme post Boca Unidos

En sus primera palabras como jugador del 'Bicho', Román dejó en claro que algo se había roto entre ellos al bajarlo del pedestal en el que lo tenía, para depositar allí a su nuevo entrenador, Claudio Borghi. ¿Tendrá vuelta atrás este 'Romance'?