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El grupo terrorista Al Shabab, con vínculos con Al Qaeda, intentó hoy tomar el palacio presidencial somalí y fue rechazado por el ejército, con un saldo de una decena de muertos.
Por su parte, varios testigos señalaron que se oyeron explosiones y disparos entre hombres armados y fuerzas de seguridad.
El ataque de los milicianos de Al Shabab al palacio presidencial de Mogadiscio "terminó y la situación está bajo control", dijeron fuentes de seguridad.
"Nuestros combatientes están en el interior del llamado palacio presidencial, (...) controlamos el cuartel general del régimen apóstata", había afirmado algunas horas antes el vocero militar de Al Shabab, Abdulaziz Abu Musab.
El ataque frustrado se produjo cuatro días después de otra acción similar contra el Parlamento somalí, que causó al menos cuatro muertos.
El portal de internet de la cadena BBC reportó que una explosión poderosa sacudió esta tarde la capital somalí, Mogadiscio, y fue seguida de un tiroteo intenso entre el grupo de milicianos armados y la seguridad en torno al palacio presidencial.
Luego de algunas horas, durante las cuales los milicianos se atribuyeron la toma de la sede del gobierno, la situación pareció aclararse.
Abdi Ahmed, funcionario de seguridad, anunció que las cosas habían "retornado al control de las fuerzas somalíes" y que el ataque a la sede del gobierno había "terminado" con un balance de "nueve agresores muertos".
La información de la BBC agregó que el presidente de Somalia, Hassan Sheikh Mohamud, "no estaba en el palacio" al momento del ataque, sino en una "base de la fuerza de la Unión Africana". En el palacio presidencial viven varios altos funcionarios del gobierno de Somalia.
El 21 de febrero pasado, más de 15 personas habían muerto en otra acción consumada por los milicianos integristas. El 24 de mayo, hubo otro episodio una decena de fallecidos en otro atentado, esta vez contra el Parlamento.
A pesar de la expulsión de Mogadiscio y de las principales ciudades entre 2011 y 2012, la capacidad ofensiva de Al Shabab sigue siendo alta, como lo demuestran los recientes atentados. Semanas atrás el grupo amenazó con incrementar los ataques durante el mes del Ramadán.