Benfica sufrió la "maldición" y Sevilla ganó la Europa League por penales

Los lusos no ganan un título europeo desde que un técnico dejó un hechizo en 1962. Los españoles lograron su tercera corona continental

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La final de la Europa League de la temporada 2013-2014 fue otro claro ejemplo de que el Benfica está "hechizado". El Sevilla se consagró campeón del continente en el estadio de la Juventus. En Turín, la presión la tenían los portugueses, que intentaron quebrar una maldición histórica que les impide ganar torneos a nivel europeo.

La primera etapa se cerró equilibrada, con los dirigidos por Jorge Jesus más dinámicos y veloces al momento de atacar. Tuvieron las tres posibilidades más claras con una intervención de Ezequiel Garay, un cabezazo de Maximiliano Pereira y un intento de Rodrigo.

Pero el conjunto español se refugió bien en las atrapadas del guardameta Beto e inquietó en algunos pasajes a través del peso ofensivo que propone el colombiano Carlos Bacca.

En el complemento, a pesar de que Benfica tuvo la jugada más clara del partido y Pareja salvó un gol en la línea, el Sevilla contestó con ataques encabezados por José Reyes. Ninguno de los dos equipos logró capitalizar el poco peligro que generó.

La prórroga pasó sin pena ni gloria, los arqueros de ambos equipos se mantuvieron como figuras. Tanto Beto en el equipo sevillano, como Oblak en el conjunto de Lisboa, sellaron un 0-0 inquebrantable. Eso llevó el duelo a la definición por penales y Beto tapó dos tiros, el del paraguayo Oscar Cardozo y el del brasileño Rodrigo.

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El portero Beto les tapó los penales a Cardozo y a Rodrigo. Fue la figura del conjunto español

En el equipo portugués, además del delantero guaraní, del argentino Garay y el uruguayo Pereira, estuvo el argentino Nicolás Gaitan como titular.

Los hombres de Emery no solamente contaron con Bacca, sino que también tuvieron el aporte en defensa de la dupla central que conformaron Federico Fazio y Nicolás Pareja.

La maldición es obra de Bela Guttman, un entrenador austro-húngaro que fue bicampeón de Champions League (1960/61 y 1961/62) con las Águilas de Benfica, el único capaz de ganar un título europeo con el equipo lisboeta.

Tras esas conquistas, fue cesado de su cargo y a la hora de marcharse vaticinó que el club no volvería a conquistar un título europeo por 100 años.

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La tristeza de los jugadores del Benfica tras perder por penales ante Sevilla

A partir de ese momento, su pronóstico se convirtió en un karma para el conjunto lusitano: jugó siete finales y no ganó ninguna. Perdió cinco de Ligas de Campeones y dos de Copas UEFA, ahora Europa League; la última, en la pasada edición 2012/13 frente al Chelsea.

El efecto fue inmediato, tan sólo un año después de pronunciada su frase, en 1963, Benfica perdió la Final ante Milan; y luego cayó en la misma instancia frente a Inter de Milán (1965) y ante el Manchester United (1968).

A esos fracasos le siguieron 15 años sin finales y la muerte de Guttman en 1981. Parecía que el hechizo podría terminarse con su deceso, pero en Copa UEFA y Champions continuaron sus pesadillas: Anderlecht, PSV Eindhoven y Milan lo derrotaron.

Sevilla se aprovechó de la racha negativa y logró el mismo título que ganó en 2006 y 2007. En el camino a la consagración eliminó al Betis, Porto y Valencia.

Formaciones:

Benfica: Jan Oblak; Pereira, Luisao, Garay, Siqueira; Amorim, Sulejmani; Lima, Andres Gomes, Gaitan; Rodrigo. DT: Jorge Jesús

Sevilla FC: Beto, Coke, Pareja, Fazio, Alberto Moreno, Carrico, Mbia, Reyes, Rakitic, Vitolo y Carlos Bacca. DT: Unai Emery

Estadio: Juventus Stadium (Turín, Italia)

Nota: Sevilla ganó el partido 4-2 por penales