El agente inmobiliario Mirce Curkoski, de la compañía ONE Sotheby's Realty, confirmó la venta de la propiedad por 9,65 millones de dólars al empresario Christian Berdouare, quien al parecer se sintió atraído por "la ubicación" (Miami Beach) y no tanto por la historia de la mansión.
Escobar, líder del Cartel de Cali y uno de los narcotraficantes más sanguinarios de Colombia, murió en 1993 en una operación conjunta de la Policía y el Ejército colombianos.
La antigua mansión del fallecido narcotraficante había sido incautada por las autoridades de Estados Unidos en la década de los ochenta, cuando Pablo Escobar contaba en Florida con propiedades inmobiliarias por unos 20 millones de dólares.
La casa fue comprada en 1990 por el ex fiscal de Miami Roger Schindler, quien pagó entonces 915.000 dólares al Gobierno de Estados Unidos.
Ahora, la intención de Christian Berdouare como nuevo propietario es destruir la vivienda porque no le gustan los narcotraficantes y no desea "tener esa energía cerca" de él, pues "si influye en algo, es negativo", según dijo el empresario a medios locales.
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