Palermo: robaron a una cuadra del lugar en el que lincharon al delincuente el fin de semana

Ladrones armados irrumpieron en un kiosco ubicado en Coronel Díaz y Mansilla. "Estuvieron más de 10 minutos y se llevaron el dinero de la recaudación", relató Martín, el dueño del local, quien contó que un vecino le había advertido que había sido "marcado"

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Ladrones armados irrumpieron en un kiosco ubicado en Coronel Díaz y Mansilla. "Estuvieron más de 10 minutos y se llevaron el dinero de la recaudación", relató Martín, el dueño del local, quien contó que un vecino le había advertido que había sido "marcado"

El sábado pasado, en el barrio porteño de Palermo, un delincuente que había golpeado e intentado robarle la cartera a una mujer con la modalidad conocida como "motochorros", fue atrapado y atacado por unos 30 vecinos. Después de propinarle una brutal golpiza, fue entregado a la Policía. El hecho se produjo este fin de semana en la esquina de Coronel Díaz y Charcas.

Apenas tres días después y luego de la conmoción generada por el ataque contra el ladrón, un nuevo episodio de inseguridad se registró a sólo una cuadra de la esquina del linchamiento. Delincuentes armados irrumpieron esta mañana en un kiosco, situado en la Coronel Díaz y Mansilla. Se llevaron el dinero de la recaudación y se dieron a la fuga.

"Estaba mi mujer atendiendo, entró una persona y compró una cosa. Cuando le da el vuelto, el otro sacó un revólver y le apuntó. Entró otra persona y la encerraron  en el fondo. Se llevaron el dinero de la caja y todo lo que pudieron", relató Martín, dueño del kiosco asaltado.

"Había un montón de gente en la calle. Según me dijo mi mujer, se fueron caminando. Ya anoche habíamos visto algo raro con el señor que vendía flores, quien me dijo que vio a alguien hablando por teléfono y señalando hacia acá. Yo le dije que estábamos un poco perseguidos, pero no, tenía razón. Pedían tarjetas de teléfono y después el dinero de la caja. Estuvieron 10 minutos. Es una barbaridad", añadió el comerciante.

El hombre dijo que en el barrio siempre hay policías, pero que a pesar de esto, la cantidad de robos es elevada. "No podemos trabajar encerrados. Se ven policías en esta zona, pero hay muchos robos", manifestó el hombre.