De manera rápida pero tajante, el secretario de Estado norteamericano, John Kerry, desechó la posibilidad de que el gobierno de Barack Obama se posicione a favor de la Argentina en la disputa con los holdouts.
"No, no lo haremos", respondió cuando un legislador del partido republicano le preguntó ayer si el Departamento de Estado tomaría posición a favor del país, en caso de que los jueces de la Corte le requirieran una opinión sobre la decisiva instancia judicial.