Ricardo Jaime y las jubiladas prestanombre

El ex funcionario ha puesto bienes que se presumen suyos a nombre de dos octogenarias. Una es su madre. La otra era su suegra. En 2014 se resolverá su situación procesal en el caso de enriquecimiento ilícito

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 @laviericronicas 162
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La investigación periodística sobre el patrimonio de Ricardo Jaime no termina nunca de sorprender. Desde 2008 cuando comenzó la causa judicial por enriquecimiento ilícito del ex secretario de Transporte del kirchnerismo, este cronista ha seguido el caso.

Y a cada paso hay revelaciones llamativas. Entre los bienes que usaban Jaime y su entorno familiar y de negocios, se halla un avión de 4 millones de dólares, un yate de un millón de dólares, autos, casas, departamentos y otras tantas cosas que la Justicia pudo hallar.

Varios de esos bienes están a nombre de otras personas y la Justicia sospecha que fueron comprados con dineros ilegales obtenidos por Jaime y anotados como si fueran de los testaferros. Entre los que fueron acusados de testaferros están las tres hijas de Jaime, uno de sus hermanos, su ex esposa, las dos hijas de ella y hasta María Filomena Pfaffen, madre de su ex pareja.

¿Cómo fue que una jubilada que vive en Río Gallegos apareció en el entramado de compradores de bienes atribuidos a Jaime? Muy simple: el cuñado del dueño de la Terminal de Ómnibus de Retiro compró una casa en un barrio cerrado de San Isidro en nombre de Pfaffen. Raúl Glories, cuñado de Néstor Otero, procesado por pagarle el alquiler mensualmente a Jaime, abonó 450.000 pesos por una casa en el barrio cerrado Camino Real. La casa de fin de semana con pileta y gimnasio le quedaba un poco incómoda a Pfaffen, quien vive en la Patagonia.  Esa casa fue comprada por Glories/Otero en abril de 2006. En mayo de ese año Otero y Jaime firmaron un acta acuerdo para la renovación de la concesión de la Terminal de Retiro hasta el año 2015. El día de los Santos Inocentes de 2006 Néstor Kirchner refrendó el decreto por el cual extendió a la sociedad TEBA la explotación de Retiro. Lo hizo a un precio menor que el que pagaba hasta entonces: las condiciones las habían pactado Otero, en defensa de sus intereses, y Jaime, también por sus intereses. Vale la pena recordar que Otero le pagaba el alquiler de su departamento y le había "alegrado" los fines de semana a Jaime con una casa en un barrio cerrado.

Pfaffen fue la primera jubilada –que se sepa– que Jaime usó como prestanombre. Pero no la última. La anciana fue citada a declarar por el juez Sebastián Casanello y aún no se presentó debido a su delicada condición de salud. Tiene 83 años e intentó justificar el monto pagado por la casa en el barrio cerrado con ahorros familiares provenientes de la explotación de un taxi en Río Gallegos, Santa Cruz. El fiscal Carlos Rívolo no le creyó y pidió su indagatoria.

A partir de 2010, cuando les embargaron los bienes y los inhibieron a Jaime y sus testaferros, el ex secretario de Transporte tuvo que usar su imaginación y conseguir nuevos prestanombres. En los últimos tiempos Infobae  descubrió que su madre, de 83 años, es dueña de un Volkswagen Vento modelo 2013. María Margarita Silvestre es jubilada, y todos los meses va hasta alguna de las tres sucursales que el Nuevo Banco Industrial de Azul tiene en Córdoba a cobrar su mensualidad. Según pudo comprobar Infobae, el Vento patente NBS036 fue anotado el 18 de setiembre pasado en Córdoba a nombre de la mamá de Jaime. Fuentes de la municipalidad de la capital mediterránea informaron a  Infobae que Silvestre no tiene registro de conducir en esa jurisdicción. Pero bien pudo haberlo obtenido en otra localidad cordobesa. La Administración Federal de Ingresos Públicos informa en su base de datos que Silvestre no está inscripta en ningún impuesto.

Por lo tanto es bastante improbable que la jubilada de 83 haya pagado los miles de pesos que cuesta ese auto blanco con vidrios polarizados con el que Jaime salió de Tribunales de Comodoro Py hace dos semanas, cuando hizo de chofer para que declararan como imputadas su ex esposa y las dos hijas de ella.

En el entramado de prestanombres que utilizó Jaime estos años aparecieron, entre otros, un trabajador de un estacionamiento a nombre de quien pusieron un auto Honda. Y las dos ancianas, jubiladas ellas, que terminaron comprando una casa en un barrio cerrado y un auto de lujo que se condice más con el bolsillo de un ex funcionario acusado de enriquecimiento ilícito que con el de dos personas que cobrar una modesta jubilación todos los meses.

En los primeros días del año judicial 2014 el juez Sebastián Casanello estará en condiciones de resolver la situación procesal de Jaime y sus testaferros en el expediente por enriquecimiento ilícito. Pruebas en la causa judicial que investigan Casanello y fiscal Rívolo, sobran. Queda bastante claro que el ex funcionario kirchnerista vivía de un modo muy superior a lo que le permitía su sueldo de 10 mil pesos mensuales. Y que los empresarios del transporte ayudaron a que el encargado de repartir subsidios y obras públicas pasara de manera más holgada sus días como funcionario público.