Riachuelo: proponen construir cascadas para oxigenar el agua

Es un proyecto de la UBA, presentado por AySA al Banco Mundial. Abarca la edificación de siete estaciones que bombearán el agua desde cinco metros de altura para airearla

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 AFP 162
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La constante contaminación del Riachuelo y sus consecuencias es una problemática que está en la agenda de los distintos gobiernos desde hace 20 años. Al parecer, el último fallo de la Corte Suprema en el 2008 empezará a tener algunas respuestas.

El proyecto  contempla la construcción de siete estaciones que se harán en diferentes zonas del Riachuelo, en las que a través de escalones en forma de cascada se pretenderá lograr niveles de oxígeno disuelto en agua superiores a los 2mg/l. De esta forma, el agua será bombeada a 5 metros de altura, se dejará caer por las cascadas, y así ventilarla en su camino de regreso al curso principal.

El proyecto es de la Universidad de Buenos Aires, y ganó el Premio Nacional de Arquitectura y Diseños Sustentables. Asimismo, la iniciativa fue presentada por la empresa estatal Agua y Saneamiento Sociedad Anónima (AySA), dentro de las obras a realizar con el crédito de 840 millones de dólares solicitado al Banco Mundial. Con este crédito, también se busca construir un colector cloacal en la margen izquierda del Riachuelo, y un emisario que volcará las aguas tratadas ríos adentro.

Estas obras aún no fueron autorizadas pero sí adjudicadas. El colector tendrá 11,5 km de largo, y estará a cargo de Ghella-Iecsa, la misma que hizo los túneles para el arroyo Maldonado, por 2000 millones de pesos. El emisario, tendrá 11 km de largo y la construirá Impregilo por 2372 millones de pesos. Podrían estar listas para el 2019.

El convenio firmado entre AySA y la UBA estipula la instalación el año próximo de la primera estación para realizar una prueba piloto de su funcionamiento en Avellaneda. De todos modos, estas estaciones solo podrán funcionar cuando estén terminados el colector y el emisario. Además, deberán estar controlados los vuelcos de material contaminante en el Riachuelo.

El foco de las críticas se centran en el modelo realizado por AySA que muestra que en condiciones de "descarga cero", el río no alcanza niveles de oxígeno siquiera para generar lo que se denomina recreación pasiva. Ante esto, algunos especialistas aseguran que airear el agua carente de oxígeno podría generar mayores problemas: malos olores y la aparición de partículas ultramicroscópicas contaminadas con agentes patógenos suspendidas en el aire.

Raúl Estrada Oyuelo, miembro de la ONG Asociación Vecinos de La Boca, afirmó que "recomponer el río como dispuso la Corte, significa oxigenarlo". Y agregó: "El olor adicional que pueda generar las cascadas hará que la recreación, además de pasiva, sea distante".