Irán: ganó el moderado Hasan Rohani y será el sucesor de Ahmadinejad

Teherán confirmó la victoria del reformista con más del 50%, por lo que no habrá segunda vuelta. El programa nuclear, tema clave

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El candidato moderado Hasan Rohani ganó este sábado la primera vuelta de las presidenciales iraníes con más de 18 millones de votos, según resultados aun parciales pero que bastan para que sea consagrado presidente, según la información de la agencia iraní Press TV.

Rohani consiguió una amplia ventaja sobre sus adversarios conservadores. La información partió de un responsable del ministerio del Interior en la televisión estatal.

Press TV señala que el ganador cosechó 18.613.329 millones de votos, un 50,7% del electorado, superando con una gran enorme amplitud a los candidatos conservadores, frente que se presentó dividido.

Las elecciones se celebraron con una grave crisis económica como telón de fondo debido a las sanciones internacionales impuestas al país por su polémico programa nuclear y cuatro años después de la victoria del conservador Mahmoud Ahmadinejad que desencadenó protestas en la calle.

La Constitución iraní impedía a Ahmadinejad presentarse a un tercer mandato consecutivo.

Según los resultados preliminares, Rohani supera por holgado margen a tres conservadores: el alcalde de Teherán Mohamad Bagher Ghalibaf, el jefe de los negociadores nucleares Said Jalili y un ex comandante de los Guardianes de la Revolución, el ejército de élite del régimen, Mohsen Rezaie.

      
      
      
Ghalibaf, Rohani y el ayatollah Khamenei, la máxima autoridad en Irán


Los dos otros dos candidatos, el ex jefe de la diplomacia Ali Akbar Velayati y Mohammad Gharazi quedan prácticamente fuera de juego.

Hasan Rohani, de 64 años, fue el responsable de las negociaciones nucleares de Teherán durante la presidencia del reformador Mohamad Jatami (1997-2005). Defiende una mayor flexibilidad en el diálogo con las grandes potencias para aligerar las sanciones decretadas contra Teherán.

Jalili o Ghalibaf se niegan, por su parte, a hacer "concesiones", siguiendo la línea dura del guía supremo iraní Alí Khamenei.

El ministerio no proporcionó una cifra estimada de participación. Unos 50,5 millones de iraníes estaban convocados a las urnas y, según las autoridades locales citadas por la prensa, más del 70% de ellos votaron. En 2009, la tasa oficial de participación fue de 85%.

      
      

No se ha publicado ningún resultado antes de las 6:00 (1:30 GMT) del sábado, al contrario de lo que se hizo en comicios anteriores. El Consejo de los Guardianes de la Constitución, que supervisa la votación, afirmó que no se habían registrado irregularidades.

En viernes por la noche, los representantes de los seis candidatos pidieron a sus partidarios que "eviten cualquier concentración antes del anuncio de los resultados oficiales".

En 2009, el anuncio de la reelección de Ahmadinejad en la primera vuelta había provocado enfrentamientos entre la policía y los partidarios de los dos candidatos reformistas, Mir Hosein Musavi y Medi Karubi, y luego varias semanas de protestas masivas contra presuntos fraudes.

      

Musavi y Karubi, reformistas proscriptos y arrestados en 2011

El movimiento fue reprimido duramente por el poder y los dos ex candidatos se encuentra bajo arresto domiciliario desde 2011.

Lo más importante para los reformistas era movilizar a los abstencionistas que se manifestaron contra la reelección de Ahmadinejad en 2009 y que juraron que nunca más participarían en las elecciones por considerarlas de antemano fraudulentas. Para los conservadores, se trataba de demostrar que el pueblo apoya al régimen frente a sus "enemigos".

El próximo presidente será la segunda personalidad del Estado según la Constitución iraní y tendrá poca influencia sobre los asuntos estratégicos, como el nuclear, que quedan bajo autoridad directa del guía supremo.