Con autorización del club y a los tiros, la Barra de Quilmes veló a un hincha en la tribuna

Una historia increíble más en el "enfermo" fútbol argentino. En el estadio José Luis Meiszner, mientras el local jugaba un partido de Reserva ante Unión, la facción "Los Álamos", que perdió el liderazgo de la popular hace dos años, copó el espacio con 200 personas para darle el último adiós a José María Fernández, tocayo e hijo del ex líder del grupo violento. El arquero de la visita confirmó las detonaciones al aire para amedrentar

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Insólito, triste y escalofriante por donde se lo mire. El estadio "Centenario" José Luis Meiszner de la ciudad de Quilmes fue el sitio elegido por un grupo identificado como "Los Álamos" para llevar a cabo el velorio de José María Fernández, de 15 años, tocayo e hijo del ex líder de la Barrabrava del elenco del Sur de la Provincia de Buenos Aires. Lo más irritante es que se desarrolló mientras el local jugaba contra Unión por la división Reserva.

Esta facción caracterizada de la hinchada del "Cervecero" perdió el liderazgo de la popular en 2010, aunque hoy en día sigue pugnando para volver a recobrar la fuerza mayor en dicho espacio. Con autorización del club y hasta disparando al aire, unas 200 personas ingresaron a la tribuna Omar "Indio" Gómez para pasear el cajón del simpatizante fallecido tras colisionar de frente con un patrullero que lo perseguía por cometer un robo a una pareja en la misma localidad.

Sin ninguna clase de apuro y sembrando terror, obligaron al árbitro Sebastián Habib a detener el cotejo correspondiente y amagar con suspenderlo, aunque finalmente eso no sucedió porque los simpatizantes, cinco minutos después, decidieron abandonar las instalaciones luego de realizar su cometido tal como lo habían planeado.

Algo similar había pasado a principio de año, cuando el otro hijo del anterior jefe de la hinchada (Moisés) había muerto como consecuencia de un enfrentamiento con un policía de civil. Pero aquella vez, el cajón había sido ingresado a la fuerza al club.

Uno que se llevó un gran susto fue Joaquín Papeleo, arquero del conjunto santafesino que tuvo a sus espaldas el acto de despedida: "Tiraron un par de tiros, buen cagazo me pegué. Estaban atrás del arco donde yo estaba", escribió en su cuenta de Twitter.

¿Hasta cuándo?