La triste historia de un soñador abandonado

El bailarín colombiano Julián Andrés Carvajal no sólo debió soportar el alejamiento de Evangelina Anderson y Eliana Guercio en Bailando por un sueño sino que además, en su vida personal, sufrió el abandono de su madre?

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El bailarín Julián Andrés Carvajal se encuentra participando en el certamen musical Bailando por un sueño 2008, donde representa el sueño de la Fundación Solidaria La Visitación, que brinda contención, educación y alimentos a dos mil quinientos niños en el barrio San Pablo, de Medellín.

Pero, más allá de querer ayudarlos para ampliar las instalaciones de esa institución colombiana, el tema le toca muy de cerca debido a la gran similitud que hay con su historia de vida ya que, según trascendió, el soñador fue abandonado por su madre en las calles de Colombia cuando era un bebé. Afortunadamente la suerte estuvo de su lado ya que una familia lo recogió, lo adoptó y lo crió.

Si bien después de muchos años su mamá reapareció y hoy mantienen una relación vía correo electrónico, el bailarín siempre se las ingenió solo para salir adelante. Entre las actividades que realizó, se dedicó a la pornografía filmando algunas películas con escenas heterosexuales y otras homosexuales.

Las casualidades de la vida lo llevaron hasta el concurso de baile que presenta Marcelo Tinelli por la pantalla de Canal 13, donde conoció a la bella Evangelina Anderson, quien renunció a seguir bailando a su lado tras conocer la noticia de su embarazo y tomar la decisión de irse a Alemania junto al futbolista Martín Demichellis, padre de su primer heredero.

Algo similar ocurrió con la actriz Eliana Guercio, quien ingresó al show para reemplazar a Anderson pero luego de una gala, anunció que se retiraba para casarse y partir hacia Holanda con su flamante marido, el arquero Sergio Romero.

A pesar de los múltiples cambios y de estar atravesando una sentencia, Julián bailará el duelo de música country junto a la uruguaya Claudia Fernández y seguirá luchando por su sueño con las mismas ganas de siempre, esas que supo cultivar desde muy pequeño cuando ya ayudaba a diversas organizaciones barriales y su desembarco en la televisión era algo impensado.