Las 5 teorías sobre la desaparición del avión Malaysia Airlines MH370

El paradero del vuelo que se evaporó hace diez años todavía es un misterio

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Fotografía de archivo donde una mujer escribe un mensaje dedicado para los pasajeros desaparecidos del avión MH370 de Malaysia Airlines, en el Aeropuerto Internacional de Kuala Lumpur, Malasia, 6 de marzo de 2016 (EFE)
Fotografía de archivo donde una mujer escribe un mensaje dedicado para los pasajeros desaparecidos del avión MH370 de Malaysia Airlines, en el Aeropuerto Internacional de Kuala Lumpur, Malasia, 6 de marzo de 2016 (EFE)

El 8 de marzo de 2014 marcó un antes y un después en la aviación moderna con la desaparición del vuelo MH370 de Malaysia Airlines. El vuelo se dirigía de Kuala Lumpur a Beijing con 239 personas a bordo. A pesar de extensas búsquedas y el hallazgo de algunos restos del avión, el destino final de la aeronave y las circunstancias que rodearon su desaparición continúan siendo un profundo enigma.

La travesía del Boeing 777, que inicialmente prometía ser de aproximadamente seis horas, se vio interrumpida cuando, a solo una hora de vuelo, el transpondedor cesó su comunicación. El radar militar tailandés perdió su señal, y posteriormente, un cambio de ruta inesperado llevó a la pérdida total de contacto con el avión. Pese a los esfuerzos por establecer comunicación, no se recibieron mensajes de socorro ni hubo indicios de condiciones adversas o problemas técnicos que pudieran haber precedido a su desvanecimiento.

Durante la última década, la desaparición ha provocado una de las operaciones de búsqueda más grandes y costosas en la historia de la aviación. Resultaron únicamente en el descubrimiento de tres fragmentos confirmados del MH370 en el océano Índico occidental, además de una veintena de posibles piezas. Sin embargo, esas pistas no han sido suficientes para desentrañar la causa exacta detrás de la trágica pérdida del avión y sus pasajeros.

El informe final presentado por las autoridades malasias destacó una desviación intencionada del curso planeado de la aeronave, pero no logró esclarecer ni el responsable de dicha acción ni sus motivos, dejando el caso en un estado de incertidumbre.

Las teorías sobre lo ocurrido abarcan desde un fallo mecánico hasta un acto de terrorismo, sin descartar hipótesis más extravagantes que involucran fenómenos inexplicables. No obstante, la ausencia de pruebas concretas mantiene a la comunidad internacional y a los familiares de las víctimas en busca de respuestas. La complejidad y las pocas evidencias disponibles han convertido al caso del vuelo MH370 en uno de los misterios aeronáuticos más prominentes y desconcertantes del siglo.

La sombra de un uno de los aviones de los equipos de búsqueda del vuelo MH370 (Reuters)
La sombra de un uno de los aviones de los equipos de búsqueda del vuelo MH370 (Reuters)

Las teorías conspirativas

Una caida por un problema de presuracion

Una caída abrupta en el nivel de oxígeno, que habría dejado inconscientes a la tripulación y pasajeros, se señala como la explicación más plausible del incidente aéreo investigado. Este suceso habría provocado que el avión continuase su vuelo en piloto automático hasta agotar el combustible y precipitarse al mar.

Informes previos al evento, archivados hasta marzo de 2022, revelaron fallos en el sistema de presurización de la aeronave, identificados ocho meses antes del accidente. Esta situación sugiere un escenario en el que el capitán Zaharie Ahmad Shah, enfrentando una emergencia, habría intentado un retorno al punto más cercano para aterrizar, antes de perder la consciencia, gesto que explicaría la maniobra inesperada de 180° realizada en pleno vuelo.

La aeronave, un avión de Malaysia Airlines, llevaba a bordo 153 pasajeros de nacionalidad china, entre otros tripulantes de trece países. Investigaciones recientes determinaron que, momentos antes del cambio de curso, el piloto había activado un patrón de espera y, aproximándose a Malasia, desplegó los flaps, indicando planes de un aterrizaje de emergencia. La confirmación de esta teoría se ve reflejada en el hallazgo de un flaperón en Tanzania, que erosiona de manera coherente con una posición baja durante el impacto.

Tras cinco minutos, el patrón de espera fue cancelado, seguido por la desconexión del transpondedor y del sistema Acars, lo que cortó todas las comunicaciones. La hipótesis dominante sugiere que estas acciones fueron resultado de una hipoxia causada por la despresurización, la que implica síntomas como desorientación y pérdida de memoria, que hubiera afectado gravemente las capacidades cognitivas de los individuos.

Malaysia Airlines, vuelo MH370
Malaysia Airlines, vuelo MH370

Secuestro por parte del piloto

Las investigaciones sobre la teoría de un posible secuestro por parte de uno de los pilotos con la intención de aterrizar o abandonar el avión para sobrevivir han concluido en que no se encontraron motivos ni evidencias que respalden esta hipótesis. Los expertos analizaron detenidamente el comportamiento y las comunicaciones de la tripulación, así como sus condiciones personales y financieras, sin hallar indicios de conflictos, estrés o problemas que pudieran haber motivado tal acción.

La ausencia de pruebas sobre cambios significativos en las relaciones personales, financieras o laborales tanto del piloto al mando (PIC) como del primer oficial (FO) ha llevado a los investigadores a descartar la teoría del secuestro autoprovocado. Se examinaron minuciosamente las conversaciones por radio, sin detectar signos de ansiedad o estrés en las voces de los pilotos. Además, se confirmó que es imposible desactivar desde la cabina el despliegue automático de las máscaras de oxígeno, un mecanismo de seguridad crítico en situaciones de despresurización.

Este análisis exhaustivo desmiente la posibilidad de que uno de los pilotos intentara deliberadamente desviar o abandonar el avión bajo una situación controlada. Los sistemas de seguridad del avión, como el despliegue automático de máscaras de oxígeno en caso de pérdida de presión, están diseñados para proteger a la tripulación y pasajeros, permitiendo una reacción inmediata ante emergencias.

  Las investigaciones desmienten la posibilidad de que uno de los pilotos intentara deliberadamente desviar o abandonar el avión bajo una situación controlada AFP 163
Las investigaciones desmienten la posibilidad de que uno de los pilotos intentara deliberadamente desviar o abandonar el avión bajo una situación controlada AFP 163

Secuestro por parte de un miembro de la tripulación o un pasajero

En el Aeropuerto Internacional de Kuala Lumpur se llevó a cabo un minucioso procedimiento de seguridad con más de 227 pasajeros a bordo, que incluían tres niños y dos bebés, principalmente de origen chino y malasio, así como 10 tripulantes de cabina. A pesar de las rigurosas medidas de seguridad habituales, surgen preocupaciones acerca de la posibilidad de un secuestro por parte de un pasajero o un miembro de la tripulación.

Estos temores se encuentran respaldados por los antecedentes históricos de incidentes aéreos trágicos, como los atentados del 11 de septiembre, que evidenciaron que incluso aquellos pasajeros que superan los controles de seguridad pueden representar una amenaza para la seguridad aérea. Dentro de ese marco, se destaca la presencia a bordo de dos pasajeros iraníes que viajaban con documentos robados, aunque se considera que su objetivo era emigrar ilegalmente a Occidente, sin indicios de intenciones hostiles hacia la aeronave o sus ocupantes.

Además, se añade una capa de complejidad al perfil de los 10 tripulantes de cabina, todos con familias e hijos, lo que según algunos análisis disminuye la probabilidad de que alguno de ellos esté involucrado en un posible secuestro del avión. Esos elementos se combinan para presentar un panorama desafiante para las autoridades y expertos en seguridad aérea, quienes deben discernir entre las amenazas reales y las suposiciones basadas en el perfil de los viajeros y la tripulación.

Este caso subraya la continúa obligación de las autoridades aeroportuarias y las aerolíneas de permanecer precavidos y actualizar constantemente sus protocolos de seguridad, en un mundo donde las amenazas pueden provenir de los ámbitos menos esperados.

Último avisaje del avión malayo 163
Último avisaje del avión malayo 163

Secuestrado a distancia por ciberterrorismo

Boeing, el gigante de la industria aeronáutica, aseguró a investigadores que no ha puesto en funcionamiento ninguna tecnología que permita el control remoto de aviones comerciales. Este comunicado surge en respuesta a las especulaciones sobre la existencia de sistemas capaces de tomar el control de una aeronave de manera remota, especialmente a raíz de patentes previamente desarrolladas por la compañía.

En 2003, Boeing registró una patente relacionada con la toma de control remoto de aeronaves para contrarrestar intentos de secuestro. La tecnología descrita en la patente permitiría activar un piloto automático especial que imposibilitaría cualquier intervención manual, tanto de pilotos como de otras personas dentro del avión, para asegurar así que el control de la aeronave no pueda ser comprometido por agentes externos. Sin embargo, esta innovación también planteaba el riesgo de que individuos malintencionados pudieran utilizarla para apoderarse de los aviones desde tierra.

A pesar de la preocupación que generan estos desarrollos, Boeing ha sido enfático en afirmar que no se ha implementado tal sistema en ninguno de sus modelos de aviones comerciales. La compañía ha comunicado claramente este hecho a los investigadores, lo que despeja dudas sobre la posibilidad de que el vuelo MH370, operado por la aeronave 9M-MRO, hubiera sido víctima de un secuestro de este tipo. Tras un exhaustivo análisis, se ha confirmado que la tecnología necesaria para un secuestro aéreo remoto no estaba presente en dicho vuelo, poniendo fin a una serie de teorías conspirativas alrededor de este trágico evento.

Piezas encontradas del vuelo MH370 6
Piezas encontradas del vuelo MH370 6

Suicidio asistido por el piloto

Una hipótesis sugiere la posible implicación del capitán Zaharie Shah, de 53 años, quien habría ejecutado un suicidio asistido por el piloto, llevándose consigo a 227 pasajeros y 11 miembros de la tripulación.

Esta teoría sostiene que Shah habría excluido al primer oficial de la cabina, apagado los sistemas de comunicación del avión y despresurizado la cabina, causando la muerte por hipoxia a todos a bordo antes de dirigir la aeronave hacia un lugar remoto en el sur, lejos de ser encontrado. A pesar de estas conjeturas, el informe oficial del incidente descarta cambios significativos en el comportamiento o el estado emocional de Shah, que pudieran haber anticipado un acto de esta naturaleza.

El primer oficial, Fariq Abdul Hamid, de 27 años y en su primera misión en un Boeing 777 sin supervisión directa de un capitán de entrenamiento, se reportó como alguien con buen enfoque profesional y capacitación. Dado su limitado tiempo de experiencia en este tipo específico de aeronave, las teorías que lo implican como parte de un plan tan complejo parecen improbables.

Este caso recuerda a otros trágicos incidentes aéreos, como la destrucción del vuelo 9525 de Germanwings, que también fue resultado de un acto suicida por parte de un piloto. Sin embargo, la naturaleza y el contexto de la desaparición del MH370 presentan un conjunto único de misterios y teorías aún no resueltas.

La distinción entre teorías factibles y no factibles se vuelve crucial en el análisis de incidentes aéreos, donde la especulación puede fácilmente derivar en desinformación. El caso de la aeronave 9M-MRO ilustra la importancia de basarse en evidencias concretas y declaraciones oficiales para entender las circunstancias reales que rodean a los siniestros aéreos, y subraya el compromiso de fabricantes como Boeing con la seguridad aérea, a pesar de las capacidades tecnológicas existentes para alterar de forma remota las operaciones de vuelo.

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